Liudmila Peña Herrera


Haydee Santamaría, desde su propia voz

Durante un conversatorio desarrollado en la Biblioteca Nacional, en el año 1978 y registrado por el Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos (Icaic), Haydée Santamaría Cuadrado reveló que su cumpleaños no era, verdaderamente, el 31 de diciembre, como siempre había dicho. Decidió cambiar la fecha de su nacimiento, un día, cuando aún era tan pequeña que ella misma se lo creyó por muchísimo tiempo. Lo descubrió años después, cuando necesitó documentos oficiales para casarse: en ellos se declaraba que su nacimiento había ocurrido el 30 de diciembre de 1922, en la región central de Cuba.

Esta es una de las notas curiosas que aparecen en el libro Hay que defender la vida, una coedición del Fondo Editorial Casa de las Américas y la editorial Latioamericana Ocean Sur. Se trata de una compilación de textos que muestra el legado de Haydée Santamaría a la Revolución y a la cultura cubana. El trabajo de investigación y cotejo de documentos duró aproximadamente cinco años y estuvo a cargo de Ana Niria Albo Díaz, especialista de Casa de las Américas, y de Jaime Gómez Triana, vicepresidente de esa importante institución.

Para muchas personas resultará sorprendente la decisión de Haydée de celebrar sus cumpleaños un día después de haber nacido. Existen varias versiones del porqué.

“Ella cuenta que lo había cambiado para el 31 porque era la fecha en la que se celebraban las fiestas, pues el día 30 la familia estaba en los preparativos para la jornada siguiente –explica Gómez Triana–. En muchos lugares también aparece que nació el 23. Por eso, el trabajo de investigación incluyó un cotejo muy fuerte de documentación, de toda la papelería oficial y la inscripción de nacimiento. En ese proceso, fue muy importante un papelito escrito por su madre donde había puesto los días de nacimiento de sus hijos”.

Los compiladores desarrollaron una intensa revisión bibliográfica y hemerográfica en el archivo de Casa de las Américas, con la papelería atesorada en la oficina de la presidencia, pues el objetivo del libro era mostrar su pensamiento a través de los textos, cartas, discursos y otros documentos que ella escribió.

El vicepresidente de Casa de las Américas asegura que trabajaron con la guía de Myriam Radlow, quien fuera la última jefa de despacho de Haydée y todavía labora allí, con el presidente Abel Prieto.

“Revisamos todas las gavetas y encontramos maravillas: las primeras versiones de entrevistas concedidas por Haydée publicadas en distintos periódicos y revistas –asegura Gómez Triana–.  Aparecieron muchísimas cartas clasificadas por problemas sociales: becas, viviendas… En ellas, Haydée responde de manera muy directa y, en muchos casos, deja ver su postura firme, su posición frente a cualquier privilegio. De esas cartas quedó una pequeña muestra en el libro. Había otras que ya estaban en el archivo de Casa de las Américas, de la época de la Sierra Maestra, de la prisión en Guanajay y de toda la época anterior al triunfo revolucionario. Esas pueden encontrarse en una primera parte del texto”.

Para la socióloga Ana Niria Albo Díaz hurgar en los archivos fue redescubrir a la Haydée conectada con la historia, pero también con los problemas del presente que le correspondió vivir. Cuenta la especialista que hallaron referencia a charlas y alocuciones que no se encuentran publicadas.

“Eso nos permitió saber que existían, para tratar de encontrar los originales, que a veces podían ser las notas de ella en una libreta o las transcripciones de lo que le había dictado a alguna de las jefas de despacho; aunque las cartas más sorprendentes fueron las que sostuvo con el pueblo”.

De Haydée no solo impresiona su firmeza cuando le mostraron la prueba horrorosa de que habían torturado a su hermano después del asalto al cuartel Moncada. El valor para dejar la seguridad del hogar e irse a arriesgar la vida en la clandestinidad, en la Sierra, en el exilio; su capacidad de aunar a muchos intelectuales representantes de lo mejor del arte cubano y latinoamericano son parte de esa impronta que se atesora en este libro.

“La posibilidad que tuvo de dialogar con grandes intelectuales estuvo dada por la fuerza que para ella tenía el hecho de representar a la Revolución cubana y conectarla con los escritores y artistas y, a través de ellos, con los pueblos de la América Latina y del Caribe –advierte Gómez Triana–. Ella sentía que la Casa de las Américas podía ser una institución para establecer el diálogo con los creadores y las tradiciones culturales de los pueblos del continente.

“La cultura cubana le debe a Haydée el núcleo y la idea fundacional de la Casa de las Américas, que recibiera a los grandes intelectuales de nuestra América, que los trabajadores de la Casa no fueran quienes laboraban en el edificio de 3ra y G, sino todos esos escritores y artistas que estaban en sus países, en el continente, y que proponían ideas, encuentros, publicaciones. Ella logró aglutinar los proyectos de esos creadores y eso dio infinitos frutos: el premio literario Casa de las Américas con todo lo que ello significa, la canción protesta y lo que eso influyó en el nacimiento de nuestra nueva trova”.

Entre todo el pensamiento y la obra de Haydée, a Ana Niria Albo le seduce, de su personalidad, esa intuición de una mujer que, cuando triunfó la Revolución, apenas tenía el sexto grado vencido. Por eso, a lo largo de todo el libro, el lector podrá encontrar pistas sobre su sensibilidad.

Ana Niria apunta que “tal vez el ejemplo más conocido tiene que ver con el movimiento de la nueva trova y el Quinquenio Gris, ese momento difícil de la Revolución. Durante esos años, ella tuvo un papel esencial en la defensa de la justicia social y en el entendimiento de qué era lo que estaban haciendo esos jóvenes, que era algo muy diferente pero muy revolucionario. La manera en la que ella supo aglutinarlos, atraerlos hacia el proceso revolucionario habla de esa sensibilidad.

“Silvio ha contado cómo eran aquellas grandes reuniones en casa de Haydée, hablando sobre el proceso del Moncada y cómo él entendió todo lo que vivieron sus compañeros, más allá de lo que dicen los libros de Historia. Eso lo llevó a componer la Canción del elegido. El tema surgió de una conversación con Haydeé sobre Abel”.

Y asegura la compiladora que en ella “la sensibilidad está mezclada con la lealtad, con ese anhelo por lograr toda la justicia social posible, con la fidelidad. Se expresa en su testimonio donde ella relata por qué, a pesar de que después del Moncada nunca quiso estar fuera de Cuba y por eso rechaza la oportunidad de estar en el Granma, cuando Fidel le pide que vaya al exilio a reunir armamento y dinero, ella acepta. Cuando uno escucha las grabaciones de las entrevistas que le hicieron, uno se da cuenta de que en ella había una sensibilidad enorme”.

En más de 600 páginas del texto Hay que defender la vida, los lectores podrán ahondar en la apasionante vida de Haydée Santamaría a través de sus propias palabras y conocer mejor a la mujer, la revolucionaria, la fundadora de Casa de las Américas, su integridad y también el humor campesino que la caracterizó.

El volumen es la oportunidad de acercarse a una mujer que, como expresó Ana María Cabrera Mardsen, a cargo de la gestión editorial de Ocean Sur, “pudo haber pasado a la historia como la hermana de Abel, la novia de Boris Santa Coloma, como la esposa de Armando Hart, como la fiel amiga de Fidel Castro; sin embargo, ella se impuso a los prejuicios machistas de la época y quedó grabada en la historia de la Revolución Cubana como la gran mujer que es”.


CRÉDITOS

Fotos: Tomadas del Portal Informativo de Casa de las Américas



Feminista, comunicadora y sin frenos

Si a algo no puede renunciar la espirituana Lisandra Gómez Guerra, Doctora en Ciencias de la Comunicación, es a la madrugada sustanciosa en ideas y a la palabra lista para ser expresada sin tapujos ni dobleces. Son dos hábitos que forman parte de su personalidad, como su modo desinhibido de vestir y de hablar. Por eso, si alguien le pide una opinión, no puede esperar menos que la verdad pura y dura (si lo es); y si le solicitan ayuda con la revisión de un artículo, un proyecto de tesis o, incluso, que responda un cuestionario, ella —que nadie se explica cómo logra cumplir con tantas responsabilidades— dirá que sí, que claro, pero que tienes que esperar hasta mañana.

«A las 6:00 a.m. lo tendrás en tu buzón» —escribirá la noche anterior antes de irse a dormir, poco más de seis horas, para que le alcance el tiempo. Un tiempo que parece estar cronometrado, pues está dedicado a cumplir con sus múltiples obligaciones como corresponsal de Juventud Rebelde, periodista de la página cultural del semanario Escambray, profesora de la carrera de Comunicación Social en la universidad de la central provincia; reportera y directora del noticiero Al día, de Radio Sancti Spíritus; y también investigadora y vicepresidenta de la Asociación Hermanos Saíz (AHS) en ese territorio.

Ella dice que sí, que llevarlo todo a la vez «es muy complicado. Intento acomodar las tareas por prioridades en el tiempo. Me levanto todos los días a las 5:00 a.m. y eso me permite adelantar, sobre todo, en los procesos de escritura. Aunque si pudiera ponerle más horas al día, lo hiciera con sumo placer».

De cada uno de sus empeños diarios enumera lo que le enamora o le reta, y aunque ha recibido numerosos reconocimientos en cada área en la que labora, Lisandra asegura que no está satisfecha: «y creo que jamás lo estaré. Soy extremadamente autocrítica, tanto que a veces voy al extremo de la inconformidad».

Quizás de ahí haya nacido una obra periodística tan prolífica que ni ella misma sería capaz —si se lo propusiera— de recordar cada uno de los textos publicados tanto en radio, periódicos, revistas, sitios web o televisión, en los 12 años de experiencia laboral acumulados, luego de graduarse de la Facultad de Humanidades de la Universidad Central «Marta Abreu», de Las Villas. No obstante, confiesa que es el mundo de las ondas sonoras el que la tiene totalmente atrapada.

«Desde el segundo año de la carrera, la prensa radial me enamoró. Contar mediante los sonidos y las palabras es tan intenso que cuando intento hacer una obra compleja me deja sin aliento. Además, la adrenalina de la inmediatez es una de las mejores sensaciones experimentadas como profesional —dice, totalmente segura de su elección—. Radio Sancti Spíritus me ha posibilitado hacer casi todo lo que me he propuesto.

»La dirección de programas es otro placer y mucho más el noticiero Al Día, porque me permite crear un gran producto con la obra de otras muchas personas. Por eso siempre digo, ante cualquier reconocimiento, que no es solo mío, sino de todo un colectivo. Además, he logrado crear una empatía y complicidad con el equipo más pequeño (grabador, redactora, realizador de sonidos y locutores), porque hablamos un mismo idioma. Basta una sola mirada para saber lo que queremos. Y eso, cuando se dirige, es fundamental».

Entre los primeros retos que la profesión le puso delante estuvo el periodismo cultural, una tarea inesperada que se convertiría en pasión, al punto de que hoy lo toma como trabajo, pero también como placer.

«Cuando me gradué, en Radio Sancti Spíritus no había quién asumiera los temas cul-turales; así que fue una imposición, más que una elección. Pero estuve súper agradecida porque desde adolescente intentaba estar presente en cuanto suceso cultural ocurría en la ciudad. Desde ese instante, aprendo de la mano de artistas e intelectuales. Creo fiel-mente en la idea de que lo primero que hay que salvar es la cultura, porque es el sostén del resto de los procesos. Por eso, interpretarla y analizarla me desvela». En esa suerte de vigilia alerta, su posición como vicepresidenta de la AHS le sirve de puntal, porque le ha permitido «estar del otro lado del escenario cultural, mucho más cerca de los creadores —explica—. Eso ha contribuido a que comprenda mejor los procesos culturales espirituanos, lo que incide directamente en cómo hacer un periodismo más cercano a las luces y sombras de la vida sociocultural de la provincia y de Cuba».

Cinco años después de salir de las aulas universitarias, otra sorpresa le esperaba a la apasionada periodista de temas culturales: la comunicación desde la perspectiva de género.

«En 2013, mi jefe me envió a un taller sobre género, pensando que era sobre géneros periodísticos. Le agradeceré eternamente aquella equivocación. Bastó el primer encuentro con el tema para impulsarme a buscar información, en el afán de aprender más de lo que desconocía. Eso me ha servido para crecer como ser humano, al dejar a un lado prejuicios, estereotipos e intentar entender a quienes me rodean desde la multiplicidad.

»Al llegar la posibilidad del doctorado, muchas personas me dijeron que para la aprobación del tema debía ser algo poco estudiado y que me motivara, pues exigiría de mí horas de entrega. Pensé enseguida que solo existía una tesis doctoral sobre Género y Comunicación, referente para cualquier investigación: la de Isabel Moya. Se unieron así dos cosas: pasión y objetividad, ingredientes que me acompañan siempre».

-¿Cuánto se transformó tu vida profesional y personal luego de obtener el grado científico de Doctora en Ciencias de la Comunicación?

-He sentido que las personas intentan probarme, a veces con intención y otras no, como si tener el grado de Doctora me hiciera experta en todo o incapaz de equivocarme. Para mí es solo el inicio de un gran proceso en mi vida: superarme como profesional y persona. Cuando la Doctora en Ciencias Literarias Yanetsy Pino Reina aceptó ser mi tutora, me dijo que lo asumía si le aseguraba que ayudaría a otros, luego de obtener mi grado. Y con mucho placer lo hago. Alumnos, amigos, desconocidos… siempre intento guiar desde mis saberes, eternamente abiertos a nuevos horizontes.

Hago periodismo de a pie, ese que intenta auscultar la vida de una provincia. Claro que, más allá del título que guardo con cariño y orgullo, hoy soy una mejor persona y profesional por la experiencia adquirida en la investigación del Género y la Comunicación en Cuba.

-¿Carece el periodismo cubano de un enfoque ajustado a las corrientes, paradigmas y estudios de género en Latinoamérica y el mundo?

-Sí, predomina la ausencia de la perspectiva de género en nuestro periodismo. Se debe, en buena medida, a que en nuestras redacciones están hombres y mujeres herederos de una milenaria ideología y cultura patriarcales. Que no reproduzcan en sus materiales periodísticos sus roles y estereotipos es muy difícil. Transformar esas representaciones sociales implica sensibilizar y recibir educación desde la perspectiva de género, y eso debe comprenderse y hacerse cumplir como política nacional. Hay muchas intenciones, hemos ganado conocimientos en cursos y talleres, pero aún son mayoría quienes reproducen las diferencias entre hombres y mujeres, ancladas en el patriarcado, y se niegan a comprender la multiplicidad de las feminidades y masculinidades.

-¿Te ha traído sinsabores esa postura inclusiva, democratizadoramente feminista, con la que defiendes tus ideas?

-Muchos. Recuerdo que varios colegas espirituanos me cuestionaron el por qué dedicarme a realizar un doctorado sobre el tema y otros (no pocos) aún me dicen que son «exquisiteces» mías, cuando les explico cómo logramos mejores productos comunicativos si asumimos la perspectiva de género. De forma general, no se concibe como importante y vital para el ejercicio de un periodismo más comprometido con su contexto.

-Y a ti, como mujer, ¿cuánto te ha aportado y transformado ese conocimiento?

-Soy una mujer mucho más fuerte, confiada, resiliente, segura y capaz de comprender conductas, pensamientos, actitudes desde la multiplicidad misma de los seres humanos.

-¿A quiénes tienes como paradigmas de mujeres periodistas?

-Es difícil, porque son varias. Todas las que de forma ética y valiente defienden en sus creaciones sus puntos de vista con la responsabilidad social que exige esta profesión, no siempre bien comprendida.

-Defiendes con vehemencia tus criterios y gustas de imponerte desafíos constantemente… ¿Te consideras una periodista libre de tabúes?

-Intento. A veces choco con alguno y me obligo a sacarlo del camino, pero es difícil. Por eso cuando estudias sobre género, lo primero que aprendes es que estás en un constante aprendizaje.

-¿Qué te retiene en tu terruño, aun cuando te han invitado a cruzar fronteras interprovinciales?

-Nunca he pensado en irme de Sancti Spíritus. Aquí crezco como profesional. Los medios solo tienen la condición de municipal, provincial y nacional para el sistema de pago. Desde que conquistaron Internet, ya el mundo rompió esas fronteras. Aquí he escrito sobre lo que he querido; mientras que, por ejemplo, en Juventud Rebelde más de un tema me ha sido censurado porque nacionalmente no es considerado acertado. Aquí también está mi familia y tengo mi comodidad. Quizás en eso último deba trabajar para que no se convierta en un freno en mi vida.

Dice «freno» y la palabra suena fuerte, como si no estuviese hecha para ella, una mujer de 35 años a la que ni los más duros rigores de la profesión le han podido imponer límites. 

Esa seguridad que se proyecta hasta en su forma de mirar está asentada en la búsqueda constante de un modo de hacer que es unas veces impetuoso y otras, más reflexivo, pero nunca un freno.

*Tomado del libro El compromiso de los inconformes. Entrevistas a jóvenes periodistas cubanos (Ocean Sur, 2021)



Alexis Triana y el espíritu de las Romerías

“Hay un solo antídoto contra la tristeza en nuestra torre, hay una cura de caballo contra el hábito del artista o el hombre de cultura de construir a solas el discurso del mundo. Hay que hacer, hacer el bien, hacer el bien para bien, que no es redundancia y no es patrimonio del evangelio”, expresó Alexis Triana, fundador de las Romerías y presidente de honor de su comité organizador, como recordación del tradicional discurso que cada año da inicio al Festival Mundial de las Juventudes Artísticas.

En su comparecencia de este domingo en el programa Buenos Días, con motivo del inicio de la edición 27 de las Romerías de Mayo, esta vez en su versión virtual a causa de la Covid-19, Triana recordó que el 3 de mayo se celebra el día de la cruz en el mundo y rememoró la tradición histórica que hace única a la ciudad de Holguín gracias a la Loma de la Cruz.

La historia de un Festival del arte y la tradición

Alexis Triana, fundador de las Romerías y presidente de honor de su comité organizador en la RevistaBuenos Días/ tomada del perfil de facebook de rafael gonzález

Asimismo, explicó los orígenes del encuentro cultural cuando los jóvenes de entonces idearon un festival “que respetara, recorriera la tradición y llegara a la contemporaneidad. Se trataba de cómo asumir la historia, porque ‘no hay hoy sin ayer’, y cómo hacerlo desde el respeto a los maestros fundadores, desde el diálogo de culturas. Por eso es que en las Romerías llevamos el símbolo de los primeros habitantes —una escultura de una pequeña hacha que apareció enterrada alrededor de la Loma de la Cruz—, por la escalinata de más de 400 escalones, cada 3 de mayo. La llevamos junto a la bandera cubana y la ponemos en la cima, al lado de la cruz”.

Recordó también que a las Romerías de Mayo se convocan, cada año, a todas las escuelas de arte, los centros educacionales, las universidades, los instructores de arte, para participar en el desfile inaugural.

“Es un desfile que hacemos recorriendo casi siete kilómetros. Construir eso implica que haya rastras que llevan, por ejemplo, a los rockeros, a los actores de teatro encarnando personajes; hay congas, bandas de música… Es realmente algo muy emocionante porque la ciudad sale a darles la bienvenida a los delegados de todos los países que participan. De hecho, las Romerías han tenido más de 40 países participando”, expresó Alexis Triana.

Las Romerías en medio del aislamiento

El también director del Centro de Comunicación del Ministerio de Cultura explicó que la realización de estas Romerías multiculturales ha sido posible gracias a los jóvenes, porque “la iniciativa ha sido de los miembros de la Asociación Hermanos Saíz que han convocado a sus iguales de todo el país. Nosotros lo hicimos en sus inicios en plena crisis del Periodo Especial y fue la AHS la organización que nos respaldó y estructuró ese llamado para toda la Isla y para el mundo. Así que lo que está sucediendo ahora mismo son unas Romerías virtuales, y han sido ellos quienes han logrado hacer esa convocatoria para mantener vivo ese espíritu”. 

Romeros y romeras en las redes sociales

Desde este sábado las imágenes de los artistas y participantes a las Romerías en los años anteriores a esta edición han inundado la web. Así lo corroboró Triana, quien dijo que “muchos amigos de varias partes del mundo están subiendo sus mensajes a las redes sociales. De Argentina, México… ¡hasta de Australia me sorprendió en la madrugada un rockero enviándome su mensaje!”.

El presidente de honor del comité organizador explicó que todos los días va a estar sesionando en las redes el evento Memoria Nuestra. Y culminó diciendo: “Habrá un enlace desde el Ministerio de Cultura con Santiago de Cuba y con Holguín para que los jóvenes artistas muestren sus obras, den sus opiniones. Habrá foros virtuales y teleconferencias. Vamos a hacer hasta lo imposible para que no muera ese espíritu de Romería en tiempos de la Covid-19”.



Una pantalla y tus Romerías en Casa (+ video)

Lo habitual es que desde hace 26 ediciones atrás, en los primeros días de mayo, se celebre en la provincia de Holguín el evento más importante y multitudinario de la Asociación Hermanos Saíz  (AHS) en todo el país: las Romerías de Mayo. Lo inusual es que la gran fiesta del arte joven posponga las actividades en los espacios físicos y aproveche los medios tradicionales de comunicación y las redes sociales con el fin de socializar la obra de sus creadores.

Pero la pandemia global que obliga a las distancias impuso el reto y la dirección de la AHS lo asumió, gracias a la colaboración y disposición de no pocos intelectuales y con la ayuda del Canal Cubavisión. Así lo aseguró Rafael González Muñoz, presidente nacional de la AHS, en entrevista concedida al Noticiero Dominical:

“Hoy las Romerías de Mayo están llegando no solo a Holguín sino a todo el mundo. Creo que eso es un logro primero del pueblo de Holguín, que nos ha motivado a no dejar morir las Romerías de Mayo. La AHS no ha hecho más que ser consecuente con ese pueblo y con la tradición holguinera”.  

González Muñoz explicó que, del 2 al 8 de este mes, en el Portal del Arte Joven Cubano, la página web de la AHS, se publicarán todas las actividades que realizarán los artistas desde sus casas, así como las fotografías, videos, poemas, lecturas… que los llamados “romeros” hayan compartido sobre sus experiencias anteriores en el llamado Festival Mundial de Juventudes Artísticas.

Informó, asimismo, que a partir de este lunes se desarrollará el Congreso de Pensamiento Memoria Nuestra, columna vertebral de los debates del evento y que tradicionalmente ha contado con importantes figuras de la investigación en los diferentes campos de las Ciencias Sociales en el país. En esta ocasión están invitados todos los intelectuales, artistas y personas a quienes les interese debatir y polemizar. Con ese fin, se dedicarán dos horas diarias (de 10:00 a.m. a 12:00 p.m.) para intercambiar opiniones sobre diversos temas en la web de la organización juvenil.

Entrevista a Presidente de la AHS

Entrevista al presidente nacional de la AHS Rafael González Muñoz y trabajo periodístico desde Holguín, la ciudad de las Romerías.#RomeriasEnCasa#RomeriasDeMayo#EstamosContigo#QuedateenCasa#StreamingCuba#CubaporlaSalud#CubacontraCovid19

Publicada por Asociación Hermanos Saíz en Domingo, 3 de mayo de 2020

González Muñoz también anunció la presentación especial del documental Romerías. La utopía, en el espacio televisivo De Nuestra América, que conduce Frank Padrón.

“El resto de los eventos de las Romerías de Mayo —que son 16— pueden verse dentro de la programación que el Canal Cubavisión nos ha regalado entre siete y ocho de la noche todos los días”, dijo.

En nombre de todos los artistas jóvenes, el presidente de la AHS agradeció el apoyo brindado por las personas que contribuyen al desarrollo virtual del evento y convocó a todo el pueblo cubano a disfrutar de estas Romerías en Casa.



Romerías de Mayo, como un viaje al interior del sentimiento

Esta vez no hubo peregrinación del extranjero hacia la isla, del occidente al oriente del país, de las provincias cercanas hasta la Ciudad de los Parques, del interior de los municipios holguineros hacia la capital provincial. No ocurrirá el multitudinario ascenso de los romeros y romeras hasta la cima de la icónica Loma de la Cruz, que tantos sueños ha fundado, tantos besos ha inspirado, y tantos abrazos ha convertido a cientos de desconocidos en inolvidables amigos. Habrá que invocar el espíritu romero tarareando el Himno a la Alegría y repasando las imágenes de los encuentros anteriores como la mejor manera de desandar las calles holguineras repletas de música, danza, teatro, literatura, artes plásticas, historia.

El mundo está en pausa; el arte no. Por eso los organizadores de la edición 27 de las Romerías de Mayo decidieron apostar por una celebración sui generis del Festival Mundial de las Juventudes Artísticas, desde la distancia y con el apoyo de los medios audiovisuales y las redes sociales. Han cambiado el tradicional lema “No hay hoy sin ayer”, por otro que se ajusta más a las circunstancias actuales: “Porque no hay mañana sin hoy”. Bajo las etiquetas #RomeríasEnCasa, #ElArteNoPara y #ElArteSalva, cientos de personas se han unido a la celebración desde las diferentes plataformas de Internet para compartir fotografías, recuerdos, nostalgias, esperanzas…

Quizás a algunos les cueste entender por qué insistir en mantener las Romerías de Mayo desde “la vida digital” que existe detrás de una pantalla de televisor, móvil o computadora.  Para quien no haya estado alguna vez en medio del ambiente bohemio que reactiva las ganas de vivir, que envuelve en el espíritu eufórico de las celebraciones populares de altos quilates estéticos defendidas por los jóvenes artistas —cubanos y extranjeros— le será complejo (pero no imposible) concebir que una tradición envuelta en el halo místico del espíritu romero perviva más allá del contacto físico. A quienes les suceda, no los cuestiono, pero me gustaría encenderles la chispa de la curiosidad para que en las ediciones venideras se den un salto hasta la ciudad que no duerme, que vibra durante los primeros días de mayo.

Y es verdad que andamos recluidos, protegidos puertas adentro, para mantener a raya a un virus que nos ha vuelto el mundo de cabeza. Pero los cubanos no sabemos hacer otra cosa que transformar los reveses en victorias, así que estas Romerías se han organizado como un viaje al interior del sentimiento de cada joven artista, de cada romero, de cada cubano. Por primera vez, la Televisión Cubana ha transmitido el concierto pre-romerías, esta vez protagonizado por Polito Ibáñez, Buena Fe y David Blanco. Qué mejor oportunidad de disfrutar de su música en primera fila sin necesidad de credenciales o invitaciones especiales. Es cierto que no habrá multitudes este año, pero hoy como nunca antes está ante nosotros la oportunidad de visitar gratis, sin boleto de avión o guagua, y sin la necesidad de alojamiento, la ciudad más trasnochadora, artística y bohemia de Cuba durante los días que duren estas atípicas Romerías de Mayo. No sé ustedes, pero yo estoy escuchando ya los acordes del “canto alegre del que espera un nuevo día”.