Orígenes


Celebra AHS Jornada Literaria Orígenes dedicada a José Martí

No se detiene el quehacer de la Asociación Hermanos Saíz en Santiago de Cuba, y ahora en mayo tendrán lugar aquí el tercero y el cuarto eventos en lo que va de 2024, cuando hoy y mañana se desarrolle en la localidad de Contramaestre, la XV Jornada Provincial Literaria “Orígenes”.

La reunión literaria de los jóvenes creadores no solo santiagueros sino de otros puntos de la región oriental, está consagrada al ideario martiano, en un sitio relativamente cercano a Dos Ríos, donde el 19 de mayo de 1895 cayera en combate el Héroe Nacional de Cuba, José Martí Pérez.

Además de la Jornada Literaria Orígenes, la AHS organiza en la ciudad de Santiago de Cuba, lo que será del 23 al 25 de mayo, el Festival Nacional de Hip Hop “Palabras”.

Lo anterior trascendió en un intercambio con la prensa, sostenido por Rey Luis Correa, vicepresidente de la asociación, junto a quien se encontraban Claudio Cruz Leyva, jefe de la sección de literatura, y otros directivos de la asociación.

Cruz Leyva hizo un breve esbozo histórico del surgimiento en lo que es hoy el central azucarero América Libre, a la entrada-salida de Contramaestre, del movimiento literario Orígenes, uno de los más importantes del país.

Agregó que como parte de la jornada están diseñadas entre otras, dos actividades esenciales: una como homenaje a José Martí, con una peregrinación hasta el poblado de Remanganagua, donde las fuerzas españolas depositaron el cadáver del Apóstol en su traslado hacia Santiago de Cuba, y una visita al central “América Libre”, donde nació y se desarrolló la idea de crear “Orígenes”.

Dentro del programa de la jornada hoy y mañana en Contramaestre se estarán desarrollando espacios literarios y reflexiones en torno a la crítica, la investigación, la poesía… siempre con el componente musical a cargo de la trova.

La AHS desarrolla también el evento Tierra Adentro, el 28 de enero, fecha del natalicio en 1853 de José Martí y cierra estas celebraciones, con “Orígenes”.


Exitosa Jornada Literaria Orígenes en el oriente cubano

Entre los días 18 y 19 de mayo, la Asociación Hermanos en el municipio Contramaestre, de la provincia de Santiago de Cuba, desarrolló la XV Jornada Literaria Orígenes 2023.

Mailín Castro, coordinadora de la célula de la AHS en ese territorio suroriental, afirmó que la cita estuvo marcada por la confluencia de la literatura joven en Cuba y permitió reactivar actividades, de las cuales “Orígenes” siempre fue un catalizador.

“Además, contribuyó a devolver la trascendencia histórico cultural que tienen los dos sucesos que confluyen en el diseño del evento: la caída de Martí en Dos Ríos y el alcance en el pensamiento cubano de la revista Orígenes”, importante publicación literaria fundada por José Lezama Lima y José Rodríguez Feo que circuló en el siglo XX”.

“Lecturas de poesía, trovadas, conferencias sobre narrativa, presentación del audiolibro: Fragmentos de Luz, donde intervienen escritores de Baire y Guantánamo, así como recorrido de la ruta funeraria de José Martí hasta el cementerio Remanganaguas, sitio donde tuvo su primera sepultura, a propósito del aniversario 128 de su caída en combate, conformaron el programa de actividades de esta edición.

La cita sesionó en la sede del central América Libre, lugar que generaba el soporte económico de la publicación.

“Escritores como Osmel Valdés, Leonel Alcolea, Ariel Vega y Claudia Camejo, entre otros, estuvieron presentes en la jornada.”

De igual forma, asistieron el trovador Yanco León, la guitarrista Elvira María Skourtis Vives y la crítica de arte Iris Cruz Núñez, quien presentó el tema “Martí en la mística cubana”.

El evento confirmó, de manera general, que en el oriente cubano habrá Orígenes para rato.


Orígenes: El deber de persistir

(En busca del hombre/isla)

¿Cómo olvidar los orígenes? ¿Por qué volver al Apóstol? Hay sin dudas, muchas respuestas para estas preguntas. Algunas, tal vez se extiendan en el campo de la realidad inmediata de la isla. Otras, aparecerán ante el individuo según sus urgencias. Lo ideal es que las respuestas estén siempre, o al menos la necesidad de encontrarlas. La institucionalidad cubana (sobre todo aquella que se responsabiliza de los procesos culturales), debería ser un imán para potenciar los viejos paradigmas desde los acontecimientos actuales. Volver a Martí siempre será una solución. Aunque la figura de nuestro héroe no se gasta con el paso del tiempo, su impronta demanda otras prácticas para no ser olvidado. Su luz debe permanecer encendida ante la vista de todos. ¿Cómo no perder su luz en época de apáganos?

Cada año la filial de la Asociación Hermanos Saíz de Santiago de Cuba, desde su célula en Contramaestre, busca encontrarse con el Maestro. A veces desde el mito que hay sobre su corazón enterado en la zona, pero siempre desde la clarividencia de su pensamiento.

La jornada Orígenes, que este año llegó a su XIV edición y que por primera vez se hace presencial después de los años más agudos de la pandemia, nos trae al hombre/isla como bitácora para resistir/permanecer. Dos rutas se recorren durante los días 18, 19 y 20 de Mayo. La primera hasta Remanganaguas, lugar donde ocurrió el primer entierro de nuestro José Martí. La segunda ruta es igual de simbólica, porque va desde su producción intelectual y literaria hasta la trascendencia de su legado, visto desde la obra de los nuevos creadores cubanos.

En esta edición, también se hizo énfasis en el sistema editorial cubano y la crisis del lector en nuestra isla. De ahí los paneles y las distintas presentaciones de libros. Esta es una jornada que se ha caracterizado siempre por explorar las distintas comunidades que integran el territorio de Contramaestre. Su vínculo con la historia y con el movimiento artístico del municipio. Orígenes como jornada no solo ha salvado el quehacer literario y un vínculo más emocional de los jóvenes con el Apóstol, también ha sido (y es), una brújula gremial, una tabla de salvación ante las circunstancias.

Es imposible hablar de Orígenes y no mencionar a su creador: Eduard Encina Ramirez, poeta, pintor, promotor cultural y amigo. Hombre capaz de plantar la bandera del arte en los rincones más oscuro como una espada de luz. Cuidar a Orígenes es también cuidar a la memoria de un hombre necesario como Eduard Encina.  

En esta ocasión los invitados de otras provincias no pudieron llegar, ni siquiera los de la ciudad cabecera. Ir a Contramaestre siempre hace mucha ilusión, allí se respira un aire extraño, algo con otro peso. Fueron los jóvenes artistas (y los no tan jóvenes) del municipio los que cubrieron un programa bastante amplio. La AHS y las entidades involucradas volvieron a los escenarios indispensables, aquellos que siempre esperan al poeta, al trovador, a Martí en el rostro de muchos jóvenes.   

Mucho hay del Grupo Literario Café Bonaparte en la concepción del evento. Ellos en la actualidad son el corazón y los pulmones de cada una de las acciones. Sin un trabajo constante durante todo el año, esta fecha de seguro tendría otro sabor.

En medio de la crisis económica que atraviesa el país y que no favorece a la gestión, producción y puesta en escena de muchos espacios culturales; la AHS en Contramaestre nos da una lección de vida: “Hay que permanecer”, “Hay que encontrarse con el hombre/isla”. Todos nuestros hábitos se simplifican ante las voces de quienes construyen un país por dentro. Defender estos (mal llamados) pequeños espacios, es no olvidar. Es el deber de persistir.


Orígenes seguirá teniendo la palabra

El día 18 de mayo aún continuábamos recibiendo materiales de varias provincias del país. El equipo coordinador del evento ponía en marcha su mejor estrategia para descargar las informaciones y, a último minuto, las peripecias con el diseñador nos hicieron entrar en pánico. Nos abrumó la idea de no poder llevar a cabo en fecha la Jornada Literaria Orígenes. De no haber podido realizarse según calendario perdía su objeto histórico: el de rendir tributo al Apóstol el día19. Pero como el empeño y la entrega a lo que hacemos es la fuerza de ese motor impulsor que no claudica, el evento rompió en la mañana del 18 justo a las nueve en punto con la entrevista al Comité Organizador: el Coordinador de la Célula de Contramaestre Arnaldo Sariol, realizador audiovisual, quien fuera parte indispensable de la producción para el evento; el presidente de la filial santiaguera Juan Edilberto Sosa Torres, director del Grupo de Experimentación Escénica LA CAJA NEGRA, y la vicepresidenta Lisbeth Lima Hechavarría, escritora santiaguera. Amén de que además se contó con el trabajo del vicepresidente Erick Pérez Martín, músico, director de la banda D’Nova, quien estuvo a cargo de todo el proceso de producción y el equipo de comunicación.

Cada mañana el locutor y miembro destacado de nuestra AHS, Dayron Chang, nos ponía al tanto con los Noti Orígenes, donde no fueron pocas las sorpresas que se sucedieron a lo largo del evento. Se contó con un amplio programa donde los paneles y conversatorios nutrieron la parte teórica, resaltando momentos tales como: Digo lo ineludible: ideas como músculos en la prosa de Eduard Encina, a cargo de Jorge Labañino Legrá (Contramaestre, Santiago de Cuba). Abriendo con esta conferencia inaugural rendimos tributo al Miembro de Honor de la Asociación Hermanos Saíz, el escritor Eduard Encina, fundador del evento junto a Arnoldo Fernández Verdecia, historiador, a quien se dedicaron las siguientes entrevistas: Desde los Orígenes, sobre la fundación de la Jornada, por Lisbeth Lima Hechavarría, con el realizador audiovisual Arnaldo Sariol Valdés y Remanganaguas, ruta histórica en Contramaestre, por Yanetsy Ariste (Pinar del Río).

Esta XIII edición del Orígenes estuvo dedicada la traducción en el panorama literario actual, vistiéndonos de lujo con los panelistas: Oscar Cruz y Aida Bahr (Santiago de Cuba), ambos con una trayectoria notable en este hacer. Siguiendo esta misma temática contamos con la colaboración de la Asociación de Traductores de Santiago de Cuba con el conversatorio Los textos que Martí tradujo, por Lilian Sanz.

Tuvimos la presentación del Boletín Literario Otro Criterio, por Ernesto Andrés (Lezama), poeta y miembro de la AHS en la célula de Contramaestre, momento que estableció un nexo con la interesantísima propuesta, colaboración de los Miembros de Honor de la Célula de Songo La Maya: Eloy Díaz y Rogelio Ramos, con el conversatorio Martí y el pensamiento crítico, necesidad de una crítica artística especializada en nuestros días. Y en este recuento sobre lo fructífero en materia cognitiva, no puedo dejar de mencionar las conferencias magistrales por intelectuales santiagueros como Israel Escalona y Luis E. Jerez, con el conversatorio Martí y la intelectualidad del presente, Influencia martiana en la joven literatura de la Isla, por Rodolfo Tamayo y El pensamiento económico en Martí, en homenaje al aniversario 130 de su discurso ante la conferencia monetaria, por Reynier Rodríguez Pérez.

Pero no solo Literatura e Historia inundaron las redes por esos días, el arte todo fue protagonista de esta edición, por primera vez online, en donde el Grupo de Experimentación Escénica LA CAJA NEGRA estrenó su serie Juegos de Agua, presentando videos performans a obras clásicas de nuestra literatura como A la del amor más triste, El amor indeciso, ambos materiales por Adolfo Guzmán Pacheco, y Balada del amor tardío, por Dalia Ramón León, ambos de Santiago de Cuba, rindiendo tributo a nuestra poetisa Dulce María Loynaz.

Se inauguró la expo fotográfica Híbridos de un texto. Curada por Edgar Brielo (Jefe de la sección de artes visuales de la AHS Santiago) y Miguel Y. Cosme (Santiago de Cuba, artista visual), con la participación de creadores de todas partes del país, entre ellos la destacada artista de la plástica Tahimi Cugat Estevez (Santiago de Cuba).

La música amenizó cada noche al cierre en conciertos con los trovadores de La Habana, Inti Santana y EL GAPE, quien acaba de ganar el Premio Cubadisco 2021. Desde Villa Clara Yatser Rodríguez, presidente de la filial de la AHS en el territorio, nos deleitó como miembro del movimiento de trovadores “Trovuntivitis”, y del movimiento Caña Santa, la joven y talentosa trovadora Yeni Turiño, quien ya nos había acompañado en la edición del Orígenes en 2017. Y, por supuesto, no podían faltar los chicos del quehacer trovadoresco en el municipio Contramaestre, entre los que destacó el concierto del grupo Diástoles, integrado por Luis Ariel Fernández, Chicho Vega, Leonel Ramírez Alcolea y Livan Leyva. Además, participaron otros trovadores como: Yanco León (Bayamo), Henry Fonseca y Roe Alejandro (Contramaestre).

La peña literaria El Escriba, espacio habitual de la programación de la filial santiaguera que cada mes presta atención a un género literario distinto, realzando el quehacer de los principales exponentes en el país, llegó ese mes a su décima edición desarrollándose dentro del marco del evento. Dedicó su temática al haiku como mínima expresión poética teniendo como invitado al haijin Yulier Canuto Pérez (La Maya, Santiago de Cuba), coordinador principal del proyecto Pensar en Haiku. Se abordó la temática de Martí y el Haiku. Influencia de la cultura japonesa en la obra martiana y haijines en Cuba (http://www.ahs.cu/pensar-en-haiku/). En la sección “Café con Letras”, dedicada siempre al vínculo con la AHS, el invitado fue el joven escritor Darío Cisneros Borruel.

El día 19 de mayo en horas tempranas de la mañana se hizo entrega de una ofrenda floral en el Cementerio de Remanganaguas en conmemoración del aniversario 126 de la caída en combate del Apóstol, José Martí, a nombre de la AHS en Santiago de Cuba, su filial de Contramaestre y las autoridades del territorio. También llegaron hasta donde se encuentran los restos del colega y amigo Eduard Encina, aquellos que no dejan de sentir su ausencia. Se le dedicaron unos versos y el momento nos envolvió a todos, aun en la distancia, de una nostalgia propia del que ha sentido el vacío que dejó Encina en Orígenes.

Se presentaron novedades literarias de editoriales santiagueras: Ediciones Caserón, por Rodolfo Tamayo Castellanos, Ediciones Santiago, por Rainer Martínez, y la Editorial Oriente, la cual recién arribó a su 50 aniversario, por Roberto Carlos Founier. Además, tuvimos las presentaciones de las novedades literarias de las editoriales de la AHS: Ediciones La Luz, por Lilian Sarmiento, Elizabeth Soto y Liset Prego (Holguín). Editorial Sed de Belleza, por Alejandro Hernández, (Villa Clara), y Editorial Áncoras, por Yadian Carbonell Hechavarría (Isla de la Juventud). Y no podían faltar nuestras revistas santiagueras en el marco del evento cuyas presentaciones corrieron a cargo de Oscar Cruz, con la revista literaria La Noria, Rodolfo Tamayo con la revista Caserón, y la revista Viña Joven por Noel Pérez (Santiago de Cuba).

Los proyectos literarios del país también tuvieron su espacio. El Proyecto Islíada, del escritor Rafael Grillo, uno de los repositorios más nutridos de la literatura cubana contemporánea, así como de otros exponentes latinoamericanos, con cerca de 500 autores, celebró su décimo aniversario en el marco del evento Orígenes. Callejas, desde Trinidad, nos compartió en su intervención los objetivos fundamentales de su quehacer, donde la promoción artístico-literaria es faro para las nuevas voces. Por su parte, el Proyecto 5ta Dimensión, de literatura de Ciencia Ficción y Fantasía, coordinado por la escritora y periodista María de Jesús Chávez Vilorio, nos puso al tanto de las perspectivas futuras una vez superada esta etapa de la pandemia. El taller se mantendrá los 2dos y 3eros viernes de cada mes, y la peña, como cada 4to sábado, seguirá teniendo lugar en la programación de la Casa del Joven Creador.

Un momento de mucha fuerza dentro del programa fue la intervención del Proyecto Diversas con el conversatorio: Mujeres piensan a Martí. Este proyecto, dedicado al enfoque de género y a la desmitificación respecto a las creencias populares, pretende desde el arte enarbolar el quehacer de la mujer y la potencia de su voz. Por ende, en esta decimotercera edición del evento, pensar a Martí desde la concepción femenina, con la presencia de Sahay Fajardo, coordinadora principal del proyecto, Taína Barthel y Ada Lescay matizó con nuevos aires al Orígenes.

Los invitados agradecieron el obsequio de dos libros en el evento, uno de ellos José Martí, el apóstol de Remanganaguas, de Arnoldo Fernández y Antonio Isacc Hechavarría, a cargo de quien corrió la presentación del mismo. Se mostraron deslumbrados ante las sorpresas de la historia mientras la voz de Arnoldo narraba, como si camino a Remanganaguas fuéramos, la ruta histórico funeraria de los restos del Apóstol y el maravilloso mito que envuelve las tierras del cementerio en ese lugar, donde la magia no deja de acompañar a quienes lo visitan.

Los propósitos de esta XIII edición de la Jornada Literaria Orígenes se cumplieron dejando tras de sí una memoria histórica invaluable para la Asociación. Se logró dar un vuelo nacional al evento donde contamos con la participación de escritores de todas partes de la Isla. En las lecturas de poesía Nada en el polvo ni en la cal se encierra contamos con invitados tales: Reynaldo García Blanco (Santiago de Cuba, Premio Casa de las Américas), Onel Pérez (Contramaestre, Santiago de Cuba, Premio Poesía de Primavera), Mailin Ciria Castro (Contramaestre, Santiago de Cuba), Ernesto Andrés (Lezama) (Contramaestre, Santiago de Cuba), Jorge Labañino Legrá (Contramaestre, Santiago de Cuba, Premio La Gaceta), Hansrruel Aldana (Guantánamo), Gisselle Lucía (La Habana), Eddy Serrano Castillo (La Maya, Santiago de Cuba), Karla Gil (Guantánamo), Yess Ramirez (Guantánamo), Reinyer Rodríguez Pérez (Santiago de Cuba), Drian Orduñez (Guantánamo), Rdolfo Tamayo Castellanos (Santiago de Cuba), Roberto Fournier (Guantánamo).

Y, en las lecturas de narrativa Memoria es un taller de la existencia, contamos con escritores de la talla de Elaine Vilar Madruga, Abel Guelmes Roblejo, Barbarella D’ Acevedo, Rafael Grillo, Malena Salazar Maciá, de La Habana. Alejandro Rama (Las Tunas, Premio Calendario 2020), Raúl Piad (Matanzas, Premio Calendario 2020), Javier Pupo (Contramaestre, Santiago de Cuba), Ana Lisandra López Méndez (nuevo ingreso, Contramaestre, Santiago de Cuba), Argenis Sánchez Osorio (Mayarí Arriba, Santiago de Cuba), María de Jesús Chávez Vilorio, Darío Cisneros Borruel (Santiago de Cuba) y César David Guerrero Paz (Palma Soriano, Santiago de Cuba).

Así fue, amigos, el programa de este evento en Santiago de Cuba, cargado de primicias y con un ritmo que conquistó la comunidad online, donde una vez más el trabajo de la Asociación Hermanos Saíz enarboló la bandera del hashtag más usado ahora mismo en redes por el gremio artístico joven: #ElArteSalva. Celebrando el aniversario 35 de la AHS, echamos a andar seguros de que en la edición XIV el Orígenes seguirá teniendo la palabra.


«Los agradecidos hablan de la luz»

Recuerdo aquella tarde, mientras atravesaba el Parque Céspedes, la incesante vibración del teléfono interrumpiendo de súbito la plática que sostenía con un colega. Eduard Encina al habla me invitaba a formar parte de la Jornada Literaria Orígenes en el municipio Contramaestre. La euforia fue tal que apenas me despedí del muchacho y volé a casa a preparar las cosas para el viaje. Por primera vez me invitaban a un evento como escritora. Corría el año 2016 y el Orígenes celebraba su octava edición. Compartir entre tantos escritores del territorio y sentirme parte de ese mundo, cambió, sin temor a dudas, mi perspectiva del oficio escritural y todo lo que eso encierra. Pero mentiría si ahora mismo lograse hacer alarde en cuanto al sentir que me produjo la experiencia cognitiva de la parte histórica en este evento, pues choca uno de frente y sin pausa con realidades de las que nunca escuchó en la escuela mientras estudiaba a Martí, novedades que nutren nuestra forma de ver al Apóstol, de sentirlo.

Aprendí que el evento en Contramaestre surgió, teniendo en cuenta la importancia que tuvo el municipio en la fundación de uno de los proyectos literarios más importantes de Latinoamérica en la primera mitad del siglo XX, me refiero a la Revista Orígenes, fundada por José Lezama Lima y financiada por José Rodríguez Feo, sobrino de Federico Fernández Casas, quien fuera dueño del Central América, un lugar que desprende magia y se convierte en sitio espiritual y teórico de esta cita que ya llegó a su décimo tercera edición. El auge artístico-literario que siempre ha caracterizado a Contramaestre sentó las bases para la creación de la Jornada, que tuvo su génesis en el concurso de igual nombre, allá por el 2008, bajo la tutela del escritor y Miembro de Honor de la Asociación Eduard Encina, y de poetas e historiadores como Jorge Labañino Legrá y Arnoldo Fernández, a los que se le sumaron otros escritores e intelectuales.

Confieso que nunca imaginé tener la dicha de formar parte un día del comité organizador del evento, el cual este año, dada la sostenida epidemia que continua azotando a nuestro país, por primera vez se encuentra desarrollándose de forma online. El objetivo fundamental es proponer un espacio para el debate y el intercambio entre los jóvenes creadores del territorio oriental, que en esta ocasión expande sus horizontes hacia toda la Isla.

El evento suele dividirse en tres componentes esenciales: el teórico, con paneles temáticos, conferencias, debates y charlas; el práctico, donde se llevan a cabo las lecturas, exposiciones de artes visuales, presentaciones de novedades editoriales. En este caso se presentarán Ediciones Santiago con su Colección Renacimiento; un interesantísimo proyecto con la intención de rescatar clásicos de la literatura universal y traducirlos al español, justo afín a la temática de esta edición de Orígenes, “las traducciones literarias”. También a Ediciones Caserón, la Editorial Oriente, así como las propias editoriales de la AHS en el sistema de ediciones territoriales: Sed de Belleza, La luz, Áncoras, Aldabón y Reina del Mar. Contamos en esta sección también con las presentaciones de revistas propias del contexto provincial como la Viña Joven, Caserón, La Noria, la revista de la Casa del Caribe, entre otras.

Y, por supuesto, no podría faltar el componente sociocultural, siendo uno de los momentos más notorios dentro del programa, donde se comparte con las comunidades rurales del municipio Contramaestre. Es una especie de peregrinaje que se realiza siguiendo la ruta histórico-funeraria del Apóstol, momento en el que se hacen presentaciones de libros de los escritores participantes y se donan ejemplares a las escuelitas de campo por las que arribamos en la expedición. En esta modalidad online estaremos compartiendo imágenes de visitas anteriores a lugares históricos e instituciones, así como conversatorios y debates a través de nuestras plataformas virtuales.

Encierra a esta jornada una especie de misticismo poético generado por la historia, donde no podría ser otro que Martí quien detonara sentires tales. Llegar al cementerio de Remanganaguas, donde estuvieron enterrados los restos del “más universal de los cubanos”, es el objetivo indispensable de ese peregrinar que emprenden los participantes cada 19 de mayo antes de que el sol aclare.

Imágenes de archivo de la autora

Una vez allí, luego del largo viaje, ya vamos con lo aprehendido en el camino y listos para escuchar latir el corazón de la Isla. Se dice que justo al mediodía, si te tiendes en el suelo del cementerio, puedes escuchar el latido… solo basta con cerrar los ojos y dejarte llevar.

Es una experiencia, que unida a las anécdotas que los lugareños narran, sobre todo los más longevos, cambiarán tus perspectivas de sucesos históricos. Lo mismo frente al obelisco en Dos Ríos, donde hacemos un alto para dedicar unos versos al Martí de siempre, enalteciendo su obra literaria. Y es que gratifica saberlo faro imprescindible en las jóvenes vanguardias creativas de hoy.

Admito que no hubiese sido igual la visión que atesoro del Apóstol ni el modo de interpretar sus versos sin el aporte invaluable que me ha ofrecido Orígenes en estas cinco ediciones de las que, fortuitamente, de una forma u otra, he participado. Se descorrieron las cortinas, cayó el telón de fondo y quedó ante mí un referente que guardo, ansiosa de que mi niño crezca para que descubra la belleza plena de las obras martianas. Hace justamente un año, por estas fechas, leía unos versos de La Edad de Oro a mi bebé de tan solo ocho meses, mientras en las redes recordábamos ediciones anteriores del evento y me inspire a escribir unas notas en el Diario de Mateo:

Marco en amarillo frases mágicas para mi niño.

–Mamá, los libros no se pintan.

–Cierto, amor mío, mas me dispensa un noble gesto. Apunto en estas desgastadas páginas aquello que no debes olvidar jamás, pues quién sabe si tal vez mañana a otras tierras el trabajo llame y no pueda estar siempre ahí para leértelas, mas cuando vuelva a ti, Martí y yo, orgullosos te escucharemos decir: “Los hombres no pueden ser más perfectos que el sol. El sol quema con la misma luz con que calienta. El sol tiene manchas. Los desagradecidos no hablan más que de las manchas. Los agradecidos hablan de la luz”.

Imágenes de archivo de la autora

Desde los Orígenes, versos de luz por Martí

Arnoldo Fernández Verdecia es una de esos seres de luz que llegan de pronto a correr la cortina y mostrarte lo que siempre estuvo ahí. Matizado con un prisma sutil va colando la sed de aprehender todo respecto a esa otra parte de la historia.

Y es que logra el efecto justo para sentir que Martí, su sensibilidad e ingenio creativo, está en todos nosotros, los jóvenes que hoy hacemos nuestra la realidad de que “el arte es lo único que salva”.

Es fabulosa la sensación de regresar a casa luego de la jornada literaria Orígenes y ver al Apóstol como un amigo más, no como aquel Dios al que hay que idolatrar porque lo dicen los libros de textos. Esa magia la conjura Arnoldo en cada una de las ediciones, y es por ello que hoy siento la necesidad de que todos conozcamos cómo surgió este evento.

 

Arnoldo, coméntenos sobre cuáles fueron los motivos que impulsaron al nacimiento de Orígenes.

Hay dos causalidades históricas que determinaron el surgimiento. Una, la visita del poeta César López a la Feria del Libro, 2006, en Contramaestre. Al llegar a la casa de Federico (Fico) Fernández Casas (albacea de José Rodríguez Feo), se conmovió profundamente. En la espaciosa sala nos congregamos y allí nos convocó a usar el símbolo para fundar un suceso poético de alto calibre. Nos dijo que varios de los números de la revista literaria Orígenes habían sido financiados desde allí; incluso evocó las muchísimas vacaciones de Rodríguez Feo en la casa de Fico, el encanto del Batey, los juegos de pelota celebrados allí…

La segunda, tiene que ver con César también, pues con su lucidez de santiaguero conocedor de la historia nos dijo: “no muy lejos de aquí, en Remanganaguas, se encuentra el primer sepulcro de José Martí, el precursor del Modernismo en la poesía; así que lo tienen todo, desde el punto de vista simbólico, para crear un evento de trascendencia nacional e incluso más allá de fronteras”.

Fuimos testigos de esa conversación Eduard Encina Ramírez, Jorge Labañino y yo. Entre 2007-2009, Eduard Encina probó fortuna y convocó a la vanguardia joven de la Asociación Hermanos Saíz de la región oriental. Recuerdo que tenía carácter competitivo y se premiaba en metálico. En sus tres primeras ediciones se concursó en poesía, cuento y ensayo respectivamente. Luego se volvió una odisea gestionar el financiamiento del concurso y derivó en jornada literaria, momento de intercambio, lecturas, reflexión sobre el oficio de escribir, el mundo editorial y presentaciones de libros, revistas.

 

El evento siempre ha estado marcado por la historia y el juicio crítico de intelectuales a pesar de ser un espacio literario, ¿qué importancia le confiere usted a la relación que se establece entre ambas ramas?

Historia y Literatura conviven desde el comienzo, pues el concurso primero, y la jornada después, tienen dos raíces, una literaria y la otra histórica: la revista Orígenes y sus dos grandes paradigmas, José Rodríguez Feo y José Lezama Lima; y la otra, es el Modernismo anticipado en los versos de nuestro Apóstol y su siembra primera en Remanganaguas.

Esas poderosas razones unieron a la célula de la AHS y a los miembros de la Sociedad Cultural José Martí de Contramaestre. Emprendieron el camino de una utopía, que, en cada convocatoria, exigía siempre, mucho más.

En todos estos años han convivido en la programación mesas teóricas de historiografía nacional y sobre los derroteros de la joven poesía cubana, presentaciones de libros de historia, ciencias sociales, y libros de poesía, narrativa, testimonio, novelas.

Por la jornada han pasado desde encumbrados historiadores hasta altísimos poetas y narradores del mapa insular.

¿Cómo evaluaría el vínculo de nuestros jóvenes literatos con la obra martiana, cree que aún, a pesar de los tan cambiados tiempos, sigue el Apóstol siendo faro para nuestra generación literaria?

A la generación que correspondió la fundación de Orígenes en 2007 la impulsaba el José Martí de los “Versos sencillos”, de los versos circunstanciales, de los versos en formación, de “Ismaelillo”, de los “Cuadernos de Apuntes” y, sobre todo, del “Diario de Campaña de Cabo Haitiano a Dos Ríos”. Era la comidilla de cada día, intercambiar valoraciones sobre el estilo de Martí, en una y otra zona de su tremenda creación; incluso se convirtió en parte de una intertextualidad que atraviesa toda la obra publicada por Eduard Encina, Onel Pérez Izaguirre, Jorge Labañino Legrá, Osmel Valdés, Domingo González, Ernesto Andrés de la Fe, entre otros creadores del territorio.

Creo que la continuidad generacional necesita el alimento martiano con más fervor para poder conectarse con nuevas zonas de su obra literaria que conserven actualidad y tengan respuestas para los nuevos tiempos.

Siento que esa pasión martiana que nos unió a todos en la fundación es preciso recuperarla, reactualizarla, impulsarla en la actual generación literaria, responsabilizada con el sostenimiento de un evento que nos ha trascendido a todos y que ya no es de Contramaestre, ni de Santiago; es un movimiento cultural que pertenece a toda Cuba. Es de la AHS, pero también de la Sociedad Cultural José Martí, de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba y de la Unión Nacional de Historiadores de Cuba. Creo que esas alianzas hay que estrecharlas mucho más, pero ya en términos jurídicos desde sus centros de poder hasta las mismas células de base.

 

¿Cree usted que el evento en sus doce ediciones ha logrado cumplir con los objetivos propuestos por sus creadores?

Orígenes hay que valorarlo en diferentes períodos:

  1. 2007-2009: Tenía carácter de concurso. Se premiaba en metálico. Participaban en el evento todos los creadores que resultaban finalistas. Había momentos de interacción con alumnos y maestros de las escuelas del Plan Turquino, de los barrios de Remanganaguas, de Dos Ríos, con las tabaquerías de Los Negros, de Contramaestre.
  2. 2010-2013: Se convierte en jornada literaria e histórica. Incluye el recorrido por la verdadera Ruta Funeraria del Apóstol. Cada edición se dedica a zonas temáticas concretas, como por ejemplo, leer en digital, publicar en digital, la historiografía en el reino de lo digital, pero también mesas teóricas con ponentes de lujo de todo el país, tanto en la literatura como en la historia. Aquí se incluye como novedad, la presencia de las editoriales de la AHS, de la UNEAC, y del plan de Ediciones Territoriales Riso, y de la trova y la música alternativa, como partes importantes. Fue la etapa de mayor esplendor y consolidación de Orígenes.
  3. 2014-2016: Llega a su punto máximo. Se incluye como novedad el recorrido completo por la verdadera Ruta Funeraria de José Martí, de Dos Ríos a Arroyo Blanco. Las editoriales participantes donan libros en las escuelas primarias de la Ruta Martiana, la José Martí del Jobo y la Donato Mármol de Remanganaguas. Tiene como novedad la realización de días completos del programa en la Ruta Funeraria con el nombre Travesía Literaria. Se entregan reconocimientos a personalidades e instituciones destacadas en la divulgación y defensa del patrimonio vinculado a la Ruta Funeraria. La jornada es objeto de amplias coberturas de prensa en todos los medios, en las que sobresalen publicaciones en el Crisol, Juventud Rebelde, Sierra Maestra, la Mesa Redonda, CMKC, las radios Rebelde y Progreso, Cubadebate, el portal de la AHS y de la Sociedad Cultural José Martí.
  4. 2017-2020: Eduard Encina, principal gestor, convoca a la X edición contra viento y marea. Se realiza en mayo de 2017. Fue la última gestionada desde el sacrificio de un intelectual que lo dio todo porque no muriera la jornada. Durante la misma hubo contradicciones puntuales, entre la nueva generación emergente que asumía la dirección de la célula de la AHS en Contramaestre y los fundadores del evento.

No obstante, se realizó y tuvo amplio impacto en el panorama literario e histórico del país. El 8 de septiembre de 2017 fallecía Eduard Encina. Su liderazgo no pudo ser ocupado y ello dio paso a fracturas generacionales dentro del entorno simbólico de Orígenes.

A partir de 2018, la generación emergente de Orígenes, desconociendo el pasado, intentó asumir el recurso simbólico a la personalidad de Encina como fuerza mayor y única. Fue un período de mucha incertidumbre por la ausencia del líder. Se intentaron organizar dos ediciones que marcaron el declive de la jornada, poniéndola en peligro de muerte.

 

¿Cómo le gustaría ver realizada la próxima edición?… Proyecciones futuras para el evento.

Sería hermoso ver unidas a la generación fundacional de Orígenes y a la emergente, más allá de cualquier espíritu de feudo o vanidad personal.

Tendría mucho más alcance la jornada, si es de Cuba, más que de cualquier región de provincias.

Se agradecería el respeto a las dos raíces históricas que determinaron el nacimiento del evento; ellas deben formar parte del programa de todas las convocatorias que se lancen en el futuro.

La generación fundacional y la emergente impulsarán, a partir de esta edición, el surgimiento del Movimiento Literario Orígenes, presidido por una personalidad destacada de nuestra cultura e integrado por un comité organizador, liderado por la AHS como su vanguardia, pero formado, además, por la Sociedad Cultural José Martí, la UNEAC, la UNHIC y la UPEC.

Ayudaría mucho que cada edición se dedique a personalidades e instituciones destacadas en la defensa de la historia y la literatura local y nacional.

***

Orígenes ha forjado en todos los que hemos tenido el privilegio de participar, una nueva concepción martiana, la misma que ha permitido establecer esos vínculos intergeneracionales que comentaba Arnoldo. Solo basta reconocer la sencillez y contundencia en los versos de Martí para estar en sintonía. Activar cuanto sea necesario en aras de mantener viva esta jornada literaria, en pos de la creación como vía de salvación, es el objetivo fundamental. Por ello, esta décimo tercera edición del evento supone nuevos retos, dispuestos siempre desde la joven vanguardia artística a ser fieles a nuestra brújula creativa, porque “los agradecidos siempre hablamos de la luz”.


Lo más genuino de nuestra trova

Desde 1964, ha sido siempre el mes de marzo la fecha escogida para la realización, en Santiago de Cuba, del Festival Internacional de la Trova Pepe Sánchez, considerado el más antiguo de Cuba. Siempre en celebración del Día de la Trova y los Trovadores, 19 de marzo, fecha de nacimiento de José Sánchez (Pepe Sánchez), maestro de la trova y creador del primer bolero grabado en 1883 “Tristeza”, en esta edición el Festival está dedicado al aniversario 35 de la Asociación Hermanos Saíz y al destacado músico Alejandro Almenares.

cortesía del entrevistado

Decir Alejandro Almenares trae a mí recuerdos muy lindos de una infancia feliz. El acercamiento a la buena música, mi primer pentagrama, la emoción de mis acordes en una guitarra hecha con sus propias manos, las improvisaciones en las descargas familiares. Y aunque después de los estudios musicales el periodismo me atrapó, agradeceré siempre su guía y paciencia. Es un enorme placer conocerle, así que le propongo acercarnos a sus orígenes.

cortesía del entrevistado

Músico “santiaguerísimo”, portador de un estilo peculiar de interpretación en la guitarra, el tres y el requinto, Alejandro Almenares siempre afirma que de su padre lo aprendió todo, del gran músico Ángel Almenares Guirola –importante guitarrista y compositor santiaguero de mediados del siglo XX–. Cuenta con orgullo que a menudo su casa se llenaba de músicos que iban a compartir con su padre: Sindo Garay, Miguel Matamoros, Ñico Saquito; “crecí en ese mundo, donde se hablaba todo el tiempo de música”.

cortesía del entrevistado

Varias veces escuché las anécdotas de los 13 de marzo de cada año, cuando le hacían serenatas a su padre para esperar el cumpleaños: “casi siempre se amanecía, y yo sin pegar un ojo, con miedo a perderme algo, escuchando atento a esos inmortales”. Crecí en ese mundo, en mi hogar conocí a otros grandes”.

Jocosamente dice que cree haber nacido con una guitarra debajo del brazo, y es que a los siete años fabricó su primera guitarrita con caja de tabaco: “me llamaba la atención un poco la carpintería, así que agarré un buen día un cuchillo, una segueta, reutilicé los pedazos que quedaban de las cuerdas que se le reventaban a mi padre, y con mucha paciencia y dedicación la armé”. A partir de ese momento sus dotes como diestro lutier crecieron, al igual que la fama que lo persigue hasta hoy.

cortesía del entrevistado

Hace mucho tiempo que perdió la cuenta de los instrumentos que ha fabricado, ajustado o reparado. Confiesa que su secreto está en la utilidad y no en la belleza: “quienes los han tocado, siempre opinan que no saben cómo me las arreglo para que mis instrumentos estén al quilo”. Hace aproximadamente 50 años lo acompaña su requinto, y sigue intacto, como el primer día: “sabes que ni lo pulimento ni nada, pero ha caminado el mundo y no se desafina”

Con mucho cariño recuerdo su insistencia porque estudiara, solía decirme que no se había graduado de nada por falta de tiempo, que “aquella etapa estaba dura y había que lucharse los quilos”.

En el tiempo que su padre trabajaba la barbería, él aprovechaba su instrumento para acercarse y aprender. Eso lo fue entrenando, además, gustaba de escuchar radio y estar muy pendiente de los arreglos musicales de su padre y las consultas de sus amigos.

cortesía del entrevistado

Ya con 13 años se hizo un guitarrita de cuatro cuerdas, y un día sorprendió a su padre pidiéndole que lo acompañara con la suya: “toca cualquiera de tus canciones, papá”.  Emocionado, siempre cuenta, que en aquel momento su madre se echó a reír primero y luego rompió a llorar cuando descubrió su talento para tocar la guitarra prima. A partir de ahí despegó su carrera musical, acompañando a su padre o en sus propios grupos.

cortesía del entrevistado

Ha recorrido muchos países defendiendo la música tradicional cubana e incentivando a la nueva generación a acercarse, escuchar y aprender. Músico inigualable, de fama internacional, sin perder la simpleza de su andar y lo peculiar de su sonrisa, sin verle diferente atravesar las calles de su Tivolí querido.

Hoy asegura que su segundo hogar sigue siendo La Casa de la Trova y agradece a Santiago de Cuba por el amor que desde siempre le ha profesado su gente. Gracias a ti, Alejandro Almenares, por ser lo más genuino de nuestra trova.


Compás #2: Salvando la memoria (+ Galería)

Una nueva travesía musical desde el ciberespacio, ha sido la segunda jornada del Jazz Namá. El evento se acercó a quien cariñosamente llamamos Miguelón, reconocido percusionista matancero,  miembro de la UNEAC, profesor y promotor del jazz cubano. Una merecida cápsula Jazz Namá Plus para Miguel Rodríguez Zulueta, director del grupo Mestizaje, uno de los mayores exponentes del AfroJazz cubano, que prestigia el festival.

Rodríguez Zulueta (Miguelón)

“No podría contarse la historia cultural de Santiago de Cuba sin hacer referencia a la Casa del Caribe. Como institución rectora de los estudios sobre los procesos socio-culturales de la región, su hacer ha significado un enlace con otros pueblos con los cuales compartimos ideas, ancestros, motivaciones y color”. Fueron algunas de las palabras que escribiera Juan Edilberto Sosa Torres, presidente de la AHS en la provincia, para la entrega del reconocimiento por los 40 años de la Fiesta del Fuego. Momento especial de la jornada que fue transmitido en vivo.

entrega de reconocimientos

“Para mí el amor es la llave de todo, el motor del mundo, es la energía secreta detrás de cada nota que toco”. Bajo esa premisa vive y hace buena música David Gómez Cruz, estudiante de saxofón del conservatorio Esteban Salas, en la urbe santiaguera. Un joven al cual su talento e inquietud musical lo acercaron al jazz.

El documental Bitácora, de la AHS en la Ciudad Héroe, le dio la oportunidad de visualizar su obra y darle la certeza de estar transitando por los caminos correctos dentro del amplio espectro de la música cubana. Así demostró en su cápsula promocional Jazz Namá Plus y en su improvisación sobre el tema challenge del Festival.

Pero David no está solo, dirige el grupo DjazzVi, impetuosos jóvenes que aportan singular cubanía al jazz, así demostraron en su concierto “A tocar con manana que no hay más ná.”

Esta edición del Festival Jazz Namá propone un reto de interpretación musical, la invitación ya está en las redes, y el grupo Influencia Jazz Trío también aceptó el desafío de improvisar sobre el tema challenge del evento, compuesto por José Ernesto González.

David Gómez Cruz, director del grupo DjazzVi

David Gómez Cruz, director del grupo DjazzVi

El guitarrista Andy Garcia Ginoris, director de la agrupación matancera, comenta al Portal del Arte Joven Cubano: “Hacemos música porque nos nace y es la forma que tenemos de expresarnos y dar a conocer quiénes somos”. Y en esta octava edición del Festival, sus tres momentos les permitieron demostrar quiénes eran dentro del panorama musical cubano.

grupo Influencia Jazz Trío

La propia historia ha demostrado, que ir en busca de las raíces es sinónimo de buenos resultados para la cultura, sobre todo cuando los jóvenes son protagonistas del cambio y hacen eco del carácter desenfadado y progresista, que caracteriza este género.

Este evento tiene la intención de crear nexos entre los jazzistas contemporáneos y los orígenes del jazz desde una óptica local e historiográfica, en un ambiente acogedor que permita la libre creación y expresión, de un arte que siga siendo contemporáneo y renovador, aunque sea ciento por ciento online.

 


«Mi intención es estar junto al arte»

Tuve el gusto de presentar online la primera novela de Leonardo Espinoza Benavides, cuando la segunda oleada del coronavirus y la cuarentena amenazaban con transformar nuestra producción del pensamiento y la realidad. Adiós, loxonauta me sirvió como pretexto para (re)visitar la obra de Leo y (re)conocer en ella los signos de lo bien hecho. Novela lúdica, con guiños literarios intemporales, que evidencia una tradición literaria continental enfocada hacia el desarrollo de la ciencia ficción. Además, fue el perfecto motivo que me invitó a dialogar nuevamente con la poética de Leonardo (café de por medio). 

¿Hasta qué punto lo real, esa construcción semiótica que denominamos de dicha forma, impactó en la gestación de la historia de Adiós, loxonauta, tu más reciente novela?

Creo que lo real, en este caso, moldeó la génesis de la obra misma: en medio de una pandemia, como médico trabajando jornadas intensas y otras de completo aislamiento, todo fue adoptando un ritmo particular. La incertidumbre, lo efímero, por momentos una danza con lo aparentemente absurdo y frágil, mi propio oficio en el área de la salud y en el área de las letras, todo en una especie de renovación y redefinición. En ese sentido, en esa forma de realidad en la que nos encontrábamos, fue que esta novela (corta en parte por eso mismo, creo yo) se forjó. Si bien podría lanzar paralelismos de realidad con algunas vivencias personales, eso muy rara vez es mi intención creativa: soy de la escuela de narrar usando la experiencia observada de lo humano más que la interioridad biográfica propia, si bien los pincelazos que mezclan los colores entre ambas son inevitables. Adiós, loxonauta es por completo un hijo literario del año 2020, y todo lo que ello conlleva. Aprovechando la expresión de “construcción semiótica”, soy de los que apuntan a una semiosis que culmine y se determine en el interpretante, desde el cual espero que surja su signo respectivo.

Tus protagonistas apuestan por un space opera donde la especialidad médica de la dermatología es el epicentro que mueve y conduce todas sus aventuras, ¿por qué?, ¿partes también allí de un análisis de tu realidad?

Esta pregunta me acorrala completamente en la respuesta que quise esquivar recién (¡y me saca una risa!). La dermatología: pues, sí. Creo que puedo direccionar esta idea hacia dos caminos válidos. El primero, el universal, el que en cierto modo quise defender en la primera pregunta: cuando narro me gusta crear personajes que han surgido de mis encuentros con personas del mundo real (¡hasta la palabra nos está persiguiendo, lo real!); me gusta trabajar la multiplicidad de opciones simbólicas e interpretativas, cerrando una trama o historia central, por así decirlo, pero dejando, a propósito, el espacio suficiente para que el lector haga suyo este momento novelado incompleto, imperfecto como lo es todo, y que pueda así reverberar hasta quién sabe dónde. El segundo camino, sin embargo, es el que me acorrala siempre: ¿cuánto de mí hay en Ítalo Calvino? Son varios los amigos médicos que me han apuntado, algunos con escepticismo y otros con certeza apodíctica, de que este Ítalo sería yo. ¡No! No, no. (¿O sí? ¡No!). Creo que es un sesgo de convivencia solamente.

Lo que sí es cierto es que intento escribir y crear desde territorios que manejo lo suficientemente bien como para construir sobre ellos de manera cómoda (en este caso, el conocimiento biológico, médico y dermatológico como cimiento). Vuelvo a la semiosis: el lector médico no se detiene con mucho entusiasmo cuando dejo rastros o rutas hacia Calvino (el escritor, no el homonauta), o a Borges o Rufus; mientras que el lector no-médico no se detiene, usualmente —siempre hay excepciones— en el detalle, por ejemplo, de la esfingomielinasa D y la estructura del gremio de la Federación. Así que, volviendo a la pregunta original, sobre dónde comienzo mi análisis de la realidad: desde esto, desde la ambivalencia, la bifurcación, la imperfección, la falta de inicio y final consciente, cualquiera sea el personaje principal, real o fantástico.

En la novela se mezclan los registros de la tragicomedia, con muchos visos lúdicos, incluso irónicos. Esta hibridación de registros, ¿ejercicio de textualidad al azar o pauta consciente?

Pauta consciente. Y gran desafío, por varias razones: hasta entonces, mi obra siempre había estado enmarcada en los cuentos, más o menos largos, pero cuentos al final del día. Y mi voz como autor se enmarcaba en una ciencia ficción con cierta tendencia a lo poético. Algo que me gusta, claro, y que gozo cultivar como parte de mi forma de hacer arte. Pero… no había logrado embarcarme en la novela. Sentí que para lograrlo debía desarmarme y rearmarme, sin temores, sin frenos, a lo que surgiese. Así nació el estilo de Adiós, loxonauta, una comedia por momentos satírica y por momentos tragicómica. Fue la forma espontánea en que pude largarme a una narración más extensa, dejando que los personajes fueran más humanos aún. Y enfatizo lo de humanos porque creo que, por mucho que pueda experimentar y divagar con mi pluma, la esencia de lo que me nace contar se mantiene: historias de gente sencilla en mundos complejos, en busca de sentido y de salvaguardar la ilusión que les permite seguir adelante. Soy incapaz, por ahora al menos, de formar un héroe clásico o una epopeya de final glorioso. Algún día, quizás, pero no por el momento. Me gusta la marginalidad y la confusión existencial. Mi siguiente gran desafío personal es ver qué cosa nacerá entre lo poético y lo tragicómico que he estado cosechando.

¿Has pensado que las aventuras de Ítalo Calvino, homo sapiens, y su colega Krek, loxosceles sapiens, podrían devenir en una saga?

¡Otra vez arrinconado! Debo confesar que no soy muy amigo de las sagas, en general, pero esto me lo han pedido bastante (¡y me alegra mucho, por supuesto!). Cuando pienso en sagas pienso en esos ejemplares de nuestros vecinos anglosajones que sacan tomos y tomos de quinientas y miles de páginas, y de solo verlos me generan ansiedad. ¡Cuántos libros podría leerme en ese tiempo, cuántos autores! Tal vez sea algo regional y vivencial, pero una saga me resuena como inadecuada a la forma en que vivo: entre medicina y literatura suelo dormir tan solo un puñado de horas al día (recuperadas el fin de semana; todo bien), y de tan solo imaginar la cantidad de tiempo que me llevaría leer una de esas sagas… Me pasa lo mismo con las series televisadas, como cuando te recomiendan ver una y al consultar por la cantidad de temporadas resulta que tiene diecisiete y contando. ¡Uf! ¿Y si pasa algo y no logro terminarla? ¿O si no me gusta, pero resuelvo terminar de verla de todos modos? Así que, considerando todo esto, por supuesto que haré una saga con Calvino y Krek. ¿Acaso no les dije que lo mío discurre por la confusión existencial? (Bromas solamente, con una risa a modo de secuela propia del año pasado).

Lo cierto es que sí, creo que haré una saga, ya casi me terminan de convencer, porque el formato me acomoda: Adiós, loxonauta se puede leer en 1-2 días tranquilamente, por lo que respeta lo que por ahora me gusta generar. Tengo pensado el nombre para el segundo libro (pero no creo que esté listo tan rápido).

¿Qué tal la experiencia de publicar con Sietch Ediciones? ¿Qué ha cambiado en los últimos años en el panorama de la ciencia ficción chilena?

¡Gran experiencia! Me tocó ver el nacimiento de esta nueva editorial, así que ha sido toda una vida con ella. Cuando Sietch Ediciones me invitó a publicar, todo era nuevo y todo existía solo a modo potencial. Michel Deb es el responsable de esta aventura: lo conocía lo suficiente, cuando me llamó, como para saber que su intención valía completamente la pena, que era algo a lo cual ameritaba ponerle todo el espíritu y toda la pasión posible. Así, lo que fue primero una publicación en su sello Vintage Pulp, terminó unos meses después convertido en el ofrecimiento de ser parte del creciente equipo editorial de Sietch.

cortesía del entrevistado

Al principio tuve mis temores: la invitación era como editor formal y yo tan solo tenía experiencia editando de manera informal y autodidacta a escritores amigos, lo cual, por mucho tiempo que llevase haciéndolo, no era lo mismo que tomar un cargo como tal. Cuando supe que la editora en jefe del equipo sería Jean Véliz D’Angelo (con formación profesional), entonces me atreví y acepté. Hoy por hoy soy un híbrido editor/agente. Y ha sido maravilloso. Somos una pequeña familia con un mismo sueño: permitir el surgimiento de nuevas historias, acompañando a sus autores y tratándolos como si fueran parte, también, de la gran familia del Sietch. He aprendido un montón, de verdad. Lo que antes conocía solo como autor, ahora lo he podido ver desde el interior de la maquinaria misma, comprendiendo todo lo que implica hacer un libro con cariño y dedicación. Me encanta. Me alegra trabajar con Jean, Michel, Jorge, Iván y los autores y autoras que van sumándose. Y, como si mi alegría fuera poca, aún conservo mi lazo y enorme amistad con Puerto de Escape, editorial en la que soy autor (al mando del genial editor y promotor cultural Marcelo Novoa), de tal modo que he logrado una convivencia aún mayor. Cada una tiene su estilo: cada casa editorial tiene lo suyo, son irrepetibles, creo yo.

Podría entrar a nombrar cualidades de una y otra, y también de las otras editoriales locales dedicadas a la literatura fantástica que han ido surgiendo y que han hecho del panorama chileno actual —respondiendo a la pregunta original— un verdadero momento vigoroso para la publicación independiente, forjando una nueva escena literaria sin lugar a duda, y de la cual veremos su legado en unos años más.

¿Cuál fue el principal desafío textual que enfrentaste al escribir Adiós, loxonauta? ¿Es la novela un género tan complicado como parece a simple vista?

¡Lo es! ¡Vaya que lo es! El mayor de los desafíos fue el convencerme y mentalizarme a, efectivamente, terminarla. Hay algo que siempre comento en entrevistas: soy todo lo opuesto a una persona “organizada”; nunca he usado ni agenda ni mucho menos calendario (dejo notas por ahí y me valgo de buenas amistades para los recordatorios, con la excepción de fechas esenciales, por supuesto). De hacer una analogía que me identifique: soy corredor de los 100 metros planos y jamás podría enfocarme en los 800 metros (dejo de lado los 42 kilómetros de una maratón porque todos tenemos de alguna u otra forma una meta a largo plazo). Llevo toda una vida trabajando y creando de esta forma, desde que lo recuerdo, y me funciona y me fascina. ¿Explosión creativa o umbral motivacional alcanzado? Entonces puedo estar 12 horas sin moverme en una concentración absoluta, por varios días y quizás un par de semanas. ¿Armarme una rutina de escribir un poquitito cada día? Imposible: me aniquilaría mi alter ego de antimateria. Soy un desordenado ordenado, un caótico eficiente (¡quiero creer, al menos!). Mi práctica en el oficio se encuentra, tal vez, en la irregular constancia de tales explosiones. Así que… una novela resultaba complejo en cuanto a logística. Sin embargo, las piezas alcanzaron su alineamiento y me lancé. La novela ya se había armado casi por completo en mi cabeza cuando me senté a escribirla: el aspecto dermatológico ya lo había elaborado mentalmente y el personaje del Inmortal vivía en mi imaginación desde hacía al menos 5 o 6 años, esperando pacientemente el momento de tener un espacio donde desarrollarse (incluida la idea en torno a la medusa Turritopsis dohrnii, que sí, es real); súmesele que estoy realizando un trabajo de investigación clínica en torno al loxoscelismo cutáneo y ¡pum! Era tiempo de apostarlo todo, all in. Inspirado en la extensión de novelas latinoamericanas que me encantan, particularmente Salomé, de una tremenda autora cubana, y Los cuerpos del verano, de Martín Felipe Castagnet, quise apuntar a ese estilo novelístico. Terminar el primer borrador fue intensísimo (benditos sean los momentos de aislamiento pandémico preventivo que tenía que ir tomando, siempre agradeciendo la fortuna de estar sano y salvo, y sin que me faltase nada). Lo demás fue pulir, leer, releer, lectores beta, edición y todo lo que siempre procede. En suma, es una metodología con sus pros y sus contras. El cuento, en contraparte, es un universo paralelo.

Tu personaje Ítalo Calvino es un hombre del Cono Sur, ¿sientes que la condición geográfica, el hecho de nacer en determinado país, define a tus personajes?, ¿cómo manejas las particularidades y rasgos típicos del lenguaje, teniendo en cuenta que tu personaje se relaciona, a gran escala, con otras especies?

¡Uf! Gran pregunta que me llega directo. Sí, creo que el regionalismo de mis personajes es clave fundamental para comprenderlos y descifrarlos. Pero, a su vez, es la forma en que yo mismo incursiono en el tema: me resultaría difícil poner en palabras explícitas mi cosmovisión al respecto y, por eso mismo, lo intento modelar a través de la ficción. En la Feria del Libro Independiente de Valparaíso del año pasado surgió una frase que me atrapó de una forma casi religiosa: “Chile no está resuelto… Chile tiene una pata que cojea”. Si bien creo que la misión es enorme y casi que no logro ver el panorama por completo, sí es algo que intento desarrollar, que intento aportar con mis historias. Hay algo abstracto que tan solo el arte puede moldear. Más que Chile, eso sí, cada vez me siento más atraído por ese concepto geocultural del Cono Sur. No es una atracción que comprenda del todo todavía, pero siento al Cono Sur como un hogar que, a pesar de las turbulencias mundiales que puedan estar ocurriendo, me entrega un cierto cobijo agradable, acogedor, alejándome de posibles nacionalismos fronterizos añejos y, a la vez, configurándome una aldea social abarcable dentro de mi pequeñez humana. De ahí que el español de Ítalo es un híbrido chileno-rioplatense y de ahí que Santiago sea, en aquel futuro, una playa y no una cuenca acorralada por montañas. De ahí nace mi ejercicio de identidad y comunicación. En cuanto al lenguaje entre especies distintas, lo cierto es que no era mi foco en esta novela en particular (el relativismo lingüístico de Sapir-Whorf y las tecnologías traductoras quedarán para otros textos).

cortesía del entrevistado

La relación del ser humano con otras especies inteligentes es uno de los leitmotivs de la ciencia ficción desde sus mismos orígenes como género, ¿por qué te interesa a ti?, ¿sientes que es una corriente de sentido, menos o más subterránea, que atraviesa la poética de tu obra?

Es un tema que me encanta por su enorme cantidad de formas de ser abarcado. Es inagotable, a mi parecer, porque sus límites son los mismos límites de la creatividad. En lo personal, usualmente he usado esas ideas en dos sentidos. Primero, en el incursionar sobre aquello “verdaderamente ajeno” (Stanislaw Lem y Hugo Correa como inspiraciones inevitables); y, segundo, en el aspecto del tropo “espejo”, donde la representación de lo ajeno es tan solo una forma de reflejar algo humano, lo cual sí creo que va con una corriente de sentido que tal vez estoy construyendo de manera no del todo consciente. Confieso, eso sí, que tiendo más al robot-espejo que al extraterrestre-espejo pero, dentro de la variabilidad de refracciones, son dos que gozo tanto leer como escribir. Siempre es desafiante no caer en la mera caricaturización.

¿Es la conquista de un lenguaje particular, de una poética propia, una de tus búsquedas centrales como escritor, o prefieres ir por otros linderos y persiguiendo otros horizontes?

Qué difícil saberlo… (Esta pregunta me hizo parar de escribir, echarme atrás en la silla y mirar el infinito un buen par de minutos… Resultaron ser varios minutos más de lo esperado; pero me tomé un café y volví). Creo que la respuesta es, en primera instancia, que sí: busco una voz propia, de fondo y de forma, aunque tal conquista viene siendo la conquista de uno mismo, acaso un recorrido de por vida. En ese sentido, mi intención es estar junto/con/el Arte. Crear con tal visión y propósito. Hay una pulsión, ¿quizá determinista?, de por medio. Aun así, aunque expresar mi propio desarrollo me resulte complicado, hay algo que sí puedo declarar como horizonte y objetivo, más allá de mi persona: espero que, en algún tiempo y momento, haya al menos un lector que al leer mis historias sienta lo mismo que yo he sentido y sigo sintiendo cuando leo uno de esos libros que te cambian la vida, que te nutren el alma.

Por último, me gustaría que recomendaras un par de relatos tuyos para leer en esta cuarentena, y algunos libros de ciencia ficción que creas pueden acompañarnos bien en estos tiempos que corren.

Para partir el 2021 les recomendaría, o más bien los invito, a que lean los cuentos más nuevos que he publicado por estos días: “Y luego los ángeles olvidan rezar por nosotros”, que apareció recién en la Revista Aeternum, de Perú, en un número titulado “Extrahumanos”; y “Umbrales virulentos: antología de ciencia ficción latinoamericana”, de la editorial venezolana Fundajau, donde aparecen cuatro microcuentos de mi autoría junto a los de otros representantes de la región (¡que están de lujo!). En ambos casos se van a topar con unas ilustraciones increíbles. Pueden dar con los paraderos del material a través de Facebook/Google y, ante cualquier dificultad, me avisan y se los consigo. También les cuento que estoy a la espera de que se publique un cuento al que le tengo un cariño especial, “Dani Dinosaurio (Ve-eleh Shemot)”, pronto a ser impreso en la Revista Crononautas N°2. Y en cuanto a recomendaciones de libros para los tiempos que corren, mis seleccionados vienen siendo: 8 voces: antología de cuentos LGBTIQ+, de Sietch Ediciones (Chile), ciencia ficción fascinantemente novedosa; Recognize Fascism, de la editorial World Weaver Press (Estados Unidos), antologado y editado por Crystal M. Huff, para embarcarse en ciencia ficción y fantasía de corte político, con dos chilenos publicados de por medio; Misión a Laozi, novela del chileno Aparicio N. Frictenns, por Editorial Puerto de Escape, a modo de brindar por el centenario de Lem; y, por último, no puedo dejar de recomendar encarecidamente que lean El Gusano, novela también, del colombiano Luis Carlos Barragán, por Ediciones Vestigio, mi lectura favorita del 2020 (me cambió la vida).


La cultura en el centro de los disparos (+ Video y tuits)

Internet es cada vez más una especie de campo de batalla. Hace algún tiempo se solían enmascarar las balas y bombas, se intentaba seducir para socavar cimientos ideológicos. Ahora se privilegia la bulla, las ofensas y hasta las amenazas de muerte como si se tratase de una lucha con fúsiles y espadas. Los memes, las canciones, los shows audiovisuales y los montajes son proyectiles cada vez más empleados, mezclados con odio y groserías.

En ese panorama lamentable, suelen ser blancos los artistas, intelectuales, periodistas, locutores, dirigentes y otros profesionales con posturas a favor de la Revolución en las redes sociales y medios tradicionales de comunicación, personas con gran influencia en la opinión pública.

Lo sucedido recientemente contra el cantante, trompetista, compositor y arreglista Alexander Abreu, director de la popular orquesta Havana D’ Primera, no es un hecho aislado. Pululan los ejemplos durante los últimos meses. A unos intentan confundirlos, a otros desacreditarlos, a varios infundirles miedo.

“He recibido mil sms (servicio de mensajes cortos) en mi teléfono donde me dicen desde Gorila hasta las peores ofensas como si yo fuera un criminal de guerra. Lo único que quiero decir es que a todos los que escriben con tanto odio les tengo un corazón lleno de amor y música”, publicó Abreu en su página de Facebook. Una respuesta digna de las esencias del arte y de Cuba, una nación que también enarbola el coraje y el valor.

La estrategia trazada y financiada desde Estados Unidos pretende lograr que los creadores teman vincular su arte o pronunciamientos públicos con la Revolución y el sistema social aquí, porque se podría desencadenar contra ellos una avalancha de mezquindades. Quienes mueven los hilos desde el exterior saben que debilitar el acompañamiento de la cultura y sus autores a la Revolución significa afectar el alma misma de la nación.

Vivimos en un país, en el que los iniciadores mismos de la lucha por su independencia fueron hombres de literatura y arte. Ahí estarán siempre Carlos Manuel de Céspedes, Padre de la Patria, aficionado al teatro y autor de obras poéticas y musicales; y Perucho Figueredo, creador del Himno Nacional; continuadores como José Martí  y Fidel Castro, intelectual indiscutible.

El propio Fidel siempre tuvo plena conciencia de la importancia de la cultura, a la cual llamó “espada y escudo de la nación”. Los símbolos, las tradiciones, el arte y el orgullo colectivo de ser cubanos deberán ser en todo momento aspectos esenciales para vencer cualquier obstáculo y no dejarse engañar. El líder sabía que la única forma de construir una obra verdaderamente perdurable es favorecer la conformación de una identidad popular cada vez más sólida y defensora de la propia Revolución y sus conquistas, como corazón fuerte de un proyecto que aspira a la superación continua. Y en momentos muy complicados como el Período Especial ratificaba: “la cultura es lo primero que hay que salvar”.

En la clausura del IX Congreso de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, el Presidente de la Republica Miguel Díaz-Canel expresó: “Somos una Revolución que puede presumir de haber sido contada y cantada, desde sus orígenes, con el talento y la originalidad de sus artistas y creadores, intérpretes genuinos de la sabia popular y también de las insatisfacciones y esperanzas del alma cubana.”

Las acciones de este tipo contra Cuba y lo que representa no son  nuevas. El imperio es, por supuesto, también cultural con la pretensión de imponer modos de vida, creencias…, una forma de conquista a nivel global. La guerra es desde hace mucho también simbólica.

A todo eso se suman otras complejidades como las provocadas por la Covid-19 y el bloqueo impuesto por EE.UU, persecuciones y más patrañas contra el país. Sin embargo, este pueblo y su Gobierno se mantienen con una fuerza tremenda y la capacidad para seguir en el camino de la dignidad, sin renunciar al progreso.

En todo ese contexto es fundamental que seamos cada vez más una familia diversa, con amor y respeto, como hijos de una madre grande, que merece todos nuestros esfuerzos. Es importante también apoyar y defender desde la ética y el valor a esos hermanos nuestros que son blancos de tanta bajeza, porque en definitiva también nos atacan a nosotros.