Convivio quiere decir Compartir

Ella puede interpretar cualquier escena, desde la madre que sale corriendo a buscar a su niño luego de un Taller de Dramaturgia el fin de semana, hasta la profesional que se ocupa de todos los detalles de su nuevo espacio. Se le ve poco, pero cuando se le ve, la Casa se inunda de jovialidad, alegría o como ella misma define ese ambiente cuasi natural, la casa se inunda de buenas energías.

Margarita Borges es muy joven y, sin embargo, ha vivido tanto que sin llegar a los 30 ya tiene tres libros publicados; su incursión en el arte va desde el canto coral, la danza y la radio hasta el tan exigente acto de pensar y escribir el teatro. Aunque se ha formado fundamentalmente en La Habana, nació en Santiago de Cuba y ese vínculo es tan raigal que declara que aquí se siente bañada de luz, como cuando lee una buena obra de teatro.

DSC01409 [1280x768]

Tras la aceptación que ha tenido la peña Convivio entre los más jóvenes y los más experimentados de las tablas, la invitamos a dialogar sobre su propuesta y motivaciones.

Margarita ¿Qué significa Convivio?

Convivio significa compartir. Es un término teatrológico del argentino Jorge Dubati y se refiere a compartir esencialmente cara a cara, frente a frente, es un intercambio de energías, sin mediación ninguna. Se ajusta muy bien al teatro por la condición teatral de la presencia; presencia del público para que sea teatro y presencia de los actores en ese espacio escénico. Es eso, un espacio para intercambiar francamente y el concepto de manera general me interesa muchísimo.

¿Por qué?

Me parece que hay espacios, pero aún son pocos, por eso uno de los objetivos de Convivio es promover el estudio del teatro y la dramaturgia en los jóvenes, atraer a nuevos talentos a la Asociación Hermanos Saíz que es para mí como un árbol madre. Me encanta pertenecer porque es una oportunidad para darse a conocer y hacerse sentir y eso es también Convivio, un espacio para que todos se conozcan y se hagan sentir.

DSC01420 [1280x768]

¿Cuándo vienes a Convivio vienes siempre a aprender, tengo la sensación que asisto a una clase magistral cada vez y de hecho, una clase muy divertida?

Es como una clase, —aunque lo pienso ahora que conversamos porque no lo había tenido claro antes— si la gente viene y se expone y expone sus ideas y los participantes contribuyen al diálogo. Casi siempre presentamos un audiovisual donde aparecen algunos de los materiales escénicos de uno de los invitados e intercambiamos con él sobre su obra. ¿Cómo ha llegado al teatro? ¿Qué está haciendo? ¿Cuáles son sus intereses? Es muy importante que todos los que lleguen a Convivio se lleven algo, intelectualmente hablando. (RISAS)

Este mes tu propuesta gira entorno a las obras de teatro para niños.

Sí, este es un tema que me interesa mucho porque siento que es poco promovido, apenas se conocen las personas que escriben obras de teatro para los infantes y este es un trabajo muy riguroso que requiere mucho talento. Justo para empezar el año invité a un joven graduado aquí en Santiago de Cuba y quien tiene un trabajo muy sólido ahora mismo, se trata de Juan Edilberto Sosa. Si bien no se dedica por entero a él, si lo ha trabajado durante su carrera teatral y de hecho, próximamente presentará un libro de teatro para niños.

Estimulas, desde Convivio, la lectura de teatro, lo subrayo porque es un género elitista, más cuando se trata del público infantil. ¿Cómo lo has pensado esta vez?

Es muy complicado que un niño lea teatro y por eso Convivio intentará promover la literatura dramática infantil que tiene importantes exponentes en todo el país. Nos acompañan amigos del Centro Provincial de Libro y se presentan algunos materiales que sin dudas son novedosos para la familia y para los más pequeños especialmente.

Has transitado por varias manifestaciones del arte y al final te has enamorado del teatro. Háblanos de tu formación. ¿Cómo llegas a convertir la escritura de este género en el centro de tu vida profesional?

Llego al Instituto Superior de Arte (ISA) de una forma poco convencional, más bien como aficionada pero mi experiencia ha sido fascinante. De niña incursioné en el canto coral, bailé un poco de danza española, también ballet, estuve en un grupo de teatro de aficionados, pero siempre supe que el teatro iba a aunar todas esas inquietudes que yo tenía. Cuando me gradúo en el ISA trabajo con el grupo de teatro El Público, también hice radio escribiendo guiones, haciendo relaciones públicas y otras muchas más cosas, pero escribir es mi refugio, así me muestro y le doy al mundo lo que soy. Yo creo que uno debe trabajar siempre en su propósito social y yo, que me he preguntado mucho si un dramaturgo tiene de veras un propósito social, pues creo que el teatro sirve para calmar inquietudes. Leer una buena obra de teatro hace sentir que uno no pierde el tiempo, sino que por el contrario queda como dice Martí, bañado de luz.

Has dicho en otras oportunidades que Santiago de Cuba es tu lugar de creación ¿por qué?

Sí, aquí creo mucho. Me acuerdo de mi obra El infierno de las putas, no podía escribirla en la escuela, allá en La Habana y vine a Santiago y la escribí en tres días. Es mi casa, el calor de la familia, el lugar donde pienso se van a fomentar cada vez más dramaturgias diferentes. Cuando llegué al ISA me dijeron: «Santiago no da dramaturgos», y eso es un error, aquí hay mucho talento, hay muchos jóvenes haciendo. La Asociación tiene un importante trabajo en este sentido que debe ser más visto, acá estoy, a la sombra y a la luz de la Asociación Hermanos Saíz para agradecerle, para apoyar y visibilizar a esas nuevas voces de la dramaturgia desde Convivio, que ojalá tenga larga vida.

Este sitio se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, que estén fuera de contexto o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Suscripción

Para recibir nuestro boletín ingrese su dirección de correo electrónico