Entrevista a Alejandro Rojas Medina, premio Calendario ciencia ficción, 2016
Para quienes conocemos de ciencia ficción lo que de agronomía, no creo sea un obstáculo pensar en Chunga Maya como la solución a esos vacíos intelectuales. Sin embargo, al adentrarnos en la historia detrás de su escritor, de sus colegas y entuertos por sortear hasta la impresión de la novela, encontraremos el background de las oscuridades de la ciencia ficción cubana y sus orígenes. Para beber de una fuente sagrada, mejor tomar el arroyo como preparación iniciática.
Es en la literatura el género de la Ciencia Ficción una zona que tiene muchos seguidores en la actualidad. ¿A qué crees se deba esto? ¿Cómo ves su presencia en relación con otras manifestaciones del arte?
Por desgracia, en algunos círculos sociales de nuestro país, se ha considerado este género como literatura de tercera categoría y escapista, la ciencia ficción en nuestro país tiene una larga trayectoria histórica. Sí, hay muchos adeptos a la temática y a sus otras manifestaciones artísticas o sea audiovisuales, historietas, videojuegos. Aunque hay otro factor lamentable y es que por motivos y factores X la ciencia ficción cubana no recibe la promoción y divulgación que se merece, además de una no contar con una crítica especializada. Más que escapar de la realidad, la ciencia ficción le ofrece un respiro o una reflexión para enfrentar el día a día.
¿Consideras la tecnología uno de los espacios donde los seguidores de la ciencia ficción puedan tener un desarrollo más pleno, en tanto los unifica desde una dimensión sin límites? ¿Cómo ves la relación de tu obra con ella?
El desarrollo tecnológico y la ciencia ficción han estado siempre vinculados de manera crucial, sirviendo de referencia o de musa el uno al otro. Muchos adelantos o comodidades de las que contamos hoy han sido producto del imaginario de un escritor de ciencia ficción. La imaginación no tiene límites, puede servir como inspiración o profecía.
¿Piensas es imprescindible para un escritor de historias fantásticas la relación con el tiempo, la ciencia, los imposibles heroicos? ¿Cómo te inspiras para crear ese mundo particular que sostiene tu obra? ¿Hay alguna relación con datos reales?
Tienes que mantenerte actualizado de lo que ocurre en el mundo a tu alrededor. Uno debe ver audiovisuales, leer mucho (no solo ciencia ficción) para aprender de aciertos y errores de los demás. Todo eso sirve de material de referencia a la hora de sentarse a escribir.
En mi caso, la mayoría de mis relatos tienen un aspecto vinculado con nuestra realidad contemporánea. Las dificultades económicas, las problemáticas de la sociedad, la desesperación de las personas por alcanzar sus sueños a pesar de los asfixiantes obstáculos. Si seguimos así, ¿hasta qué límite podemos llegar? Son mi proyección de un futuro que con suerte y responsabilidad no existirá. Son mi catarsis y mi advertencia.
¿Cómo ves la participación de los jóvenes en géneros literarios como la ciencia ficción, el fantástico, el horror, la aventura?
Tenemos muchos jóvenes talentosos, pero el problema es, que en muchos casos, la juventud no cuenta con la debida orientación, motivación, vinculación a un taller literario. Y necesitas ganar algún concurso literario para dejar de ser invisible. Además, escribir es una tarea ardua, se requiere tiempo, el producto final es grato pero sin esfuerzo y responsabilidad como todo en esta vida, no se llega a nada. Y uno tiene en general otras obligaciones cruciales que atender.
Nuestro punto débil son las historias de horror. Son pocos los autores que han tenido el atrevimiento de incursionar en este género. A pesar de opiniones que he escuchado, no creo seamos incapaces, a pesar de la aterradora realidad de escribir ese tipo de historias. Lo que hay es que atreverse y meterse con el folclor, la mitología indígena y afrocubana. Estoy seguro que se pueden crear grandes sagas y pesadillas de ahí. Hay que atreverse a apostar por lo nuestro.
¿Qué significa el Premio Calendario para tu obra? Porque eres un autor publicado, y además has participado en el Premio David, obteniendo mención.
La obligación crucial de no quedarme estancado y seguir trabajando. Motivar a los demás a lanzarse a la contienda. El principal problema de los jóvenes es que para te vean tienes que ganar un concurso si quieres una publicación de tu obra.
Coméntanos sobre tus próximos proyectos. ¿Habrá una saga de Chunga Maya?
Hablar de saga bueno… Uno de mis proyectos llamado «Coaybay Offline» es una novela de ciberpunk que incurre en el mismo mundo de Chunga Maya. En ese mundo distópico la vida de la mayoría de las personas busca su único escape digital en un video juego online. Esta trama, si todo me sale bien, es un experimento donde pienso emplear a varios personajes y deidades de nuestra mitología y folclor.
Mi otro proyecto es una novela de terror fantástico y fantasía urbana El Rumor de los Insectos. No esperen en esta vampiros depresivos ni licántropos lampiños, nosotros contamos con lo que tenemos en nuestros propios engendros de la oscuridad. Solo hay que buscarlos.
Y sobre Chunga Maya no sé; algún día podría continuar las historias de la ciudad sumergida de Clariantis.
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