Cubadisco
Cubadisco 2021: El dilema de las nominaciones
Hace algunos años que la Feria de la Música Cubana Cubadisco —cuya vigésimo tercera edición se realiza este año de manera online, del 13 al 23 de mayo— genera opiniones encontradas a partir de cómo se organizan las diversas categorÃas y nominaciones. El esfuerzo loable por desarrollar el certamen en el marco de las irreparables consecuencias para la cultura que ha dejado la pandemia de la Covid-19, amerita aún la observancia de un diseño cada vez más a tono con la realidad de la industria y con la demanda de un público ávido de contenidos musicales de excelencia.
Me refiero no solo a lo que se promociona en los medios o en las redes sociales, sino también a lo que se “explica†y se “justifica†del diseño del evento más importante que tiene la música cubana en el año, sobre todo, en el papel que juega el criterio especializado y la participación de los expertos de la industria y los creadores —principales protagonistas del certamen— a la hora de decidir su funcionalidad. Es verdad que no debe dejarse al azar o a lo que dicte la mayorÃa, la decisión final de quiénes son los nominados o premiados —para eso trabaja gran parte del año el grupo consultivo del Premio—; pero sà esclarecer qué función tiene la votación (ya sea o no por un premio de popularidad o de los medios especializados) que justamente se colocó esta vez en la plataforma Streaming Cuba y a cuyo link solo se accede a través de la telefonÃa móvil.
¿Todos tuvieron acceso? ¿Se comunicó eficientemente esta posibilidad que no se habÃa tenido en años anteriores?
Las redes sociales han venido a suplir un espacio cada vez más importante de socialización de contenidos en un paÃs que cada año incrementa su acceso a Internet. Pero, ¿cómo se redirecciona a los públicos hacia esos contenidos?, ¿es el espacio online suficiente para llamar la atención sobre un evento de relevante importancia para la cultura cubana? Si bien es un logro que un canal especializado como Clave haya engrosado su parrilla con los contenidos del certamen 14 horas de transmisiones diarias, creo que habrÃa que redireccionar esa parrilla hacia otros canales y horarios estelares necesitados de buenos contenidos musicales (los espacios de las noches de sábados y domingos por Cubavisión, por ejemplo, donde en otros momentos se han programado). Lamentablemente, en Cuba todavÃa todos no tienen acceso a Canal Clave.
Conciertos para un Premio y Documentales para un Premio, preparados especÃficamente para resaltar la labor y resultados de Cubadisco, son materiales de excelente calidad que debieran socializarse con más regularidad y en diversos medios y soportes. También el espacio Tienes la Palabra, que ha organizado en las tardes el Ministerio de Cultura y la red de Streaming Cuba, y donde han comparecido con sus criterios varios musicólogos y especialistas, ameritarÃa un lugar más relevante en los medios tradicionales de comunicación.
Pero sin dudas, la parte que sigue generando más opiniones cada año en el diseño de Cubadisco, es la manera en que se organizan las nominaciones y las categorÃas a premiar. Debo reconocer lo difÃcil que resulta organizar coherentemente dos años de producciones fonográficas (la edición de 2020 no se realizó por los efectos de la pandemia) y la amplitud de categorÃas surgidas este año por esa particularidad. Sin embargo, aún quedan lagunas conceptuales que movilizan la opinión especializada, de los públicos y de los propios músicos participantes.
Sigue la dicotomÃa dentro de la Música Urbana, donde no calificamos certeramente a ciertos géneros mal vistos por la polÃtica cultural: acabemos de llamar al reggaetón por su nombre si lo vamos a nominar y a premiar. El rap, la cultura hip-hop, la escena electrónica y otros géneros también concebidos desde la urbanidad engrosan esa categorÃa, ¿por qué el eufemismo con un género que ha evolucionado y cuya popularidad y dinámicas de producción y promoción crecen por dÃas?, ¿acaso sus valores musicales, ponderados por un jurado que nomina, no son suficientes para legitimarlo?
El criterio cuantitativo no debe ser el único medidor a la hora de organizar y diseñar las categorÃas en Cubadisco. Los criterios de selección y organicidad deben buscar el equilibrio representativo de lo que se produce musicalmente en un perÃodo, pero también de cómo se produce y cuáles son las tendencias más actuales de esa producción dentro de la industria. A mi juicio, ya es hora de que una categorÃa como el single, cuya práctica de producción está legitimada a nivel mundial, se nomine. Incluso, músicos cubanos de reconocida trayectoria como Leoni Torres o X Alfonso, como también la mayorÃa de los defensores de la escena urbana, diseñan sus lanzamientos y producciones de esta manera (el propio Leoni Torres, después de Salseando, no produjo un CD completo hasta este 2021, ¿por eso no tiene derecho a estar y competir en Cubadisco?) Algunas de las reflexiones sobre el tema ya fueron expuestas en el espacio Tienes la Palabra, donde las musicólogas Yentsy Pérez Rangel y Leannelis Cárdenas expusieron el asunto. Cubadisco tiene también la misión de orientar, de marcar pautas para la producción fonográfica en Cuba. La inserción de esta categorÃa obligarÃa a las disqueras cubanas a cambiar para bien económico y promocional sus producciones, algo que ya hacen algunas pero que solo se generaliza a la hora de hacer campañas polÃticas o de bien público.
En el mismo sentido, si hemos pasado casi dos años elaborando contenidos caseros o los llamados lives,  potenciados incluso desde la institucionalidad para dar salida a la obra de los músicos en los llamados conciertos Estamos Contigo, por qué no se tuvo en cuenta esta categorÃa que ya han introducido otros certámenes como el Lucas, por ejemplo. Hay también calidad en varios de estos materiales, capaces de competir y servir a la vez de estÃmulo a quienes no han parado su creación incluso en los momentos más difÃciles de la pandemia. De eso también trata la labor de un artista, de buscar soluciones, de ser lo suficientemente creativo a la hora de hacer llegar su obra al público.
Es difÃcil —repito— lograr uniformidad dentro de la gran variedad de producciones recibidas. Defiendo incluso la inclusión de categorÃas que este año muestran ciertas zonas pobladas de la producción, como el caso de AntologÃa/Versiones o Nuevos Cantautores (aunque esta última todavÃa es muy discordante con su hermana mayor, la tradicional Ópera Prima), pero incluso, la existencia de estas u otras categorÃas no debió imposibilitar la participación de obras que muy bien funcionaban en otras, amén de que creciera el volumen categorial. Por ejemplo, ¿que imposibilita que un excelente disco como A romper el coco, ubicado en la categorÃa Tradición Sonera del área de música Patrimonial, concurse igualmente en AntologÃa/Versiones?, ¿acaso no es también un disco de versiones? Lo mismo pudo suceder con A Journey through Cuban Music, de Aimée Nuviola, disco de versiones pero también de música bailable (categorÃa en la que ganó un Grammy Latino); o con ¡Ay! Mamá Inés. Llegó la Valdés, cuya excelente intérprete pudo también participar en CancionÃstica; o con un disco experimental de electrónica y música house como Deja la boberÃa de Dj Reitt & Shanara, conformado por versiones a temas antológicos de la música popular cubana, que pudo a su vez estar también en AntologÃa/Versiones.
Sirvan estos ejemplos como botón de muestra del problema, pero existen otros muchos dentro de los nominados de este año. ¿Por qué las cuotas? Si hay diez buenos discos en cada categorÃa, debieran estar nominados como corresponde, como sà ocurrió en las categorÃas Audiovisuales, en algunas de las cuales hay seis, siete y hasta ocho concursantes. Más importante resultarÃa analizar precisamente las áreas de silencios que todavÃa existen y que no llenan ni convocan categorÃas en importantes géneros de la música cubana desatendidos o no promocionados por las disqueras, algo que ha señalado por estos dÃas el crÃtico Oni Acosta.
La diferenciación etaria está bien para llamar la atención sobre cierta superproducción cualitativa en determinados géneros, pero ha sido una práctica de los últimos Cubadisco el separar competitivamente a los jóvenes de los consagrados, sobre todo en la música popular bailable o el jazz, y esto no me parece estratégicamente correcto. Este año, dada la cada vez más creciente participación de los jóvenes, surge Nuevos Cantautores y ninguno de los nominados en esa categorÃa participa en otras donde debieron estar: Nueva Trova, Canción Contemporánea o CancionÃstica, por solo mencionar algunas de las probables. Cubadisco premia la mejor producción de un año, ningún consagrado va a dejar de serlo por “perder†en buena lid con un joven; sin embargo, para un joven músico es muy importante saber que compitió con los mejores exponentes de su género.
Por último, quiero hacer referencia a un debate bizantino que ha avivado por estos dÃas el maestro JoaquÃn Betancourt, Premio Nacional de Música, en sus perfiles en redes sociales, y que tiene que ver con el reconocimiento de los arreglistas, repertoristas y productores musicales.
En la última edición fue reconocida con el Premio al Productor Élsida González, productora ejecutiva del disco que a la postre se alzó con el Gran Premio, Saxofones live sessions; anteriormente, en 2018, debemos suponer que Jorge Aragón, productor del disco Libre de pecado. Beatriz Márquez canta a Adolfo Guzmán ganador del Gran Premio y de varias categorÃas, quien recibió a la par el reconocimiento con la intérprete en la gala de premiados, fuera el Productor de ese año. Debo suponer que este año igualmente se dé el premio que quizá resulte del Gran Premio Cubadisco 2021. Pero, ¿por qué no se nomina igualmente esta importante especialidad en una categorÃa? Digo más, ¿por qué no se estimula debidamente la notoria labor de estos especialistas, igualmente músicos, sin los cuales la producción fonográfica no existirÃa?, ¿por qué, aunque no resulten premiados en Cubadisco, no se reconoce su labor en otras tantas producciones que desarrollan en el año y que son nominadas o premiadas en otros certámenes? (sirva de ejemplo puntual este año, el caso de Roniel Alfonso, premiado en el Grammy Latino 2019 con el disco A Journey thruogh Cuban Music de Aimée Nuviola; o el de los cubanos nominados al Grammy Latino 2020).
Estas y otras reflexiones siguen moviendo el análisis de Cubadisco 2021 y es bueno que asà sea, la polémica demuestra que la música cubana sigue estando viva y que constituye la piedra angular de las manifestaciones artÃsticas de la cultura cubana.
EL DISCO DE LA SEMANA. Añejo XXV, Tendencia
*Tomado de Cubarte
Ahora que las medidas tomadas en nuestro paÃs para evitar la propagación de la Covid-19 han dado al traste con la suspensión de Cubadisco 2020, a desarrollarse entre el 15 y el 23 de mayo de 2021, según nota oficial del Instituto Cubano de la Música; este espacio continúa acercándose a los fonogramas aspirantes a nominaciones en el evento más importante de la industria musical y discográfica de Cuba.
En esta ocasión nos referiremos a Añejo XXV, perteneciente a la Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales, Egrem, última producción discográfica del pinareño grupo Tendencia que, sin dudas, debe estar entre los propuestos en el área de música Rock.
Fundada en 1994, Tendencia arribó en el 2019 a sus primeros 25 años. Banda fundamental en la escena del rock cubano, es portadora de una sonoridad donde se mezclan la intensidad del rock más apasionado junto a la alegrÃa y el Ãmpetu contagioso del Caribe, definida como Metal Mestizo o Etno Metal, que ha marcado una etapa de búsquedas y hallazgos donde se mixtura el groove metal con elementos de la música afrocubana: rumba, conga y tradiciones folclóricas de percusión.
Con varios demos grabados y cuatro discos anteriores: Re-evolución (System Rock, 2002), Rebeldes (Egrem, 2005), Confidencial (Santo Grial Producciones, 2009) y Cargando cruces (K-100/Antipop Prod., 2018); sabe lo que es ganar Cubadisco (Ãlbum del Año, 2005), además de obtener un premio a Mejor video de rock en Lucas (2011) y Premio Cuerda Viva (2014). Añejo XXV, su quinto álbum de estudio, compila diez temas y un bonus track con canciones incluidas en placas anteriores que, de manera especial, marcan el recorrido musical de la banda en estos años: “Moñungaâ€, “Egofiliaâ€, “Aché pá téâ€, “Pal chapeaoâ€, “Al macheteâ€, “Payasoâ€, “Por tus venasâ€, “A degüelloâ€, “Mr. Fula†y “Miedo internoâ€. Resulta una recreación y una especie de vuelta antológica que reafirma el sonido caracterÃstico de Tendencia como uno de los pilares del rock nacional en las últimas décadas. El sonido gutural caracterÃstico del metal se vuelve aquà una añoranza sentida por el buen rock, lo que a la vez combina esa necesidad de creación auténtica con la mezcla de los tambores y ritmos afrocubanos. En ese sentido, temas como “Moñunga†(“Ritual en cazuelaâ€) es muy evocador en la búsqueda de una sonoridad “afrorockeraâ€, a la vez que otros como “Mr. Fula†o “Miedo interno†cumplen el cometido de crónica social más cercano a géneros como la trova.
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Con dirección general y producción musical de José E. Mederos (Kiko Tendencia: guitarra, teclados y coros), la banda a regrabado estos temas con la participación de Aniel Barrera (voz), Sergio Puente (guitarra), Jorge Alfredo Carballo (bajo), Enmanuel Pujol (timbal, congas y tambores batá), Lázaro Hernández (drums) y la colaboración especial de David Blanco en el tema “Al macheteâ€, erigido en clásico del metal doméstico. La producción ejecutiva estuvo a cargo de Adriana Pazos; la grabación, mezcla y masterización de Daelsis Pena y José Raúl Varona; la fotografÃa de Gabriel Dávalos; y el diseño de Raúl Muñoz. Â
Como siempre, les dejo este link de youtube con el performance en vivo de Tendencia tocando uno de los temas incluidos en esta placa, “Mr. Fulaâ€:
El Viaje, Zule Guerra
*Tomado de Cubarte
Por segunda ocasión llega a este espacio Zule Guerra, vocalista y jazzista cubana que nos presenta este año su última producción fonográfica y primer CD de estudio: El Viaje, perteneciente a la Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales, Egrem. Consecuente con su incursión dentro del llamado Nu jazz, es este un fonograma que se perfila como un fuerte contrincante dentro del género en el próximo Cubadisco 2020.
El talento de Zule Guerra como cantante y vocalista ha sido reconocido con un premio JoJazz de Interpretación en 2013, Gran Premio y Premio de la Popularidad en el Festival Slavianski Bazar 2014 y un Premio de Oro en el Festival de las Artes Baltic Stage, Letonia, 2015. Ya sabe lo que es ganar un Premio Cubadisco en Ópera prima fonográfica y audiovisual con Blues de Habana (Egrem, 2016), además de ser nominada en el 2018 con su EP independiente Sesiones de Vitrola. Su participación ese último año en el Festival Artes de Cuba, organizado por el Centro John F. Kennedy para las Artes Escénicas de Washington, fue de las más ovacionadas por el público y la crÃtica especializada.
A la exquisitez musical e interpretativa de este disco, debe añadirse la autorÃa de todos los temas a cargo de la propia Zule. El Viaje nos propone eso: el andar por la vida de una artista que devuelve sus vivencias en trascendentes imágenes musicales, que coquetea con una amplia variedad de estilos, desde el palo monte a la canción afrocubana (excepcional sentido del tempo en «Canción para que Luis se duerma», que recuerda por momentos el «Drume negrita» de Bola de Nieve), pasando por el latin jazz y las obvias influencias de la música cubana. Vuelve a poner de manifiesto sus dotes interpretativas, su amplio rango vocal y el poderÃo técnico y expresivo de su voz; sobre todo, el dominio del ska que tan certeramente utiliza en temas como «Criolla en blues» o «Sweet and big orange hope».
Disco acústico este, donde la improvisación llega en acordes más claros, sobre todo de la mano de la guitarra y el drums. En ese sentido, se deben destacar los arreglos de Jesús Pupo y la producción musical de Ernán López-Nussa. Elenco acompañante de lujo con el propio Pupo en el piano, Héctor Quintana en la guitarra, Samuel Burgos al bajo, Denis Boffil en la percusión, Marcos Morales en la baterÃa , Emir Santa Cruz en el saxofón y Alejandro Delgado en el fliscorno. Con Yoana Grass en la producción general, completan el equipo de realización Alfonso Peña en la grabación y mezcla; Siavash Mozaffari en la masterización; Arien Chang y René RodrÃguez en las fotos; y Marla Cruz en el diseño gráfico.
Para la promoción de este disco en las plataformas digitales, hace unos dÃas se lanzó el EPK que acompaña su presentación. En él su autora explica las interioridades y motivaciones de este viaje:
Recuerde: si va a viajar, que sea con buena música.
“Seguir haciendo músicaâ€
La música electrónica tiene ya unas cuantas décadas de historia y uno de los principales problemas que frenan su desarrollo en Cuba es la falta de escenarios para los artistas del género. Por demás, hay artistas que se salen de la norma y son calificados dentro un gran grupo como “música alternativa†o “arte undergroundâ€, a pesar de su gran diversidad.
Sin embargo, cuando eres un amante de las fiestas de DJs y vives tus noches al ritmo de las máquinas, la inserción de esta modalidad sonora en los centros nocturnos habituales de la ciudad podrÃa ser la clave para quienes desean disfrutar de propuestas musicales más atractivas.
En la búsqueda de un sello individual y común a la vez, surgió en el 2016 un proyecto musical que hoy se abre paso desde el Camagüey legendario para el mundo, con el Ãmpetu del buen arte hecho por jóvenes.
La Jornada de Música Electrónica Beat 32, auspiciada por la filial principeña de la Asociación Hermanos SaÃz, llegó a su cuarta edición para proponer nuevas prácticas de producción y difusión cultural favorecidas por el desarrollo tecnológico, siempre en sintonÃa con la creación.
Sobre este evento y el trabajo que realiza la AHS en la promoción de este género musical el Portal del Arte Joven Cubano conversó con uno de sus organizadores, Richard Castro Pimentel, más conocido como Dj Richy.

¿Cuáles son los retos de organizar y producir un festival como el Beat 32?
El 1er reto es lograr que cada año se realice un festival con una gran dosis de compromiso, entrega y seriedad de quienes trabajamos todos los dÃas para fomentar una cultura de la música electrónica en la provincia.
La cita propuso eventos teóricos que abordaron temas como la música electrónica en Cuba por el Dj Leo Milano procedente de La Habana, conferencias de marketing y producción de este tipo festivales en el paÃs. Además de los conciertos en la Terraza Arte Joven de la AHS y los Boiler Room acompañados por la muy esperada Carpa Tatoo con exponentes del arte corporal y del tatuaje.
En esta edición contamos con la participación de algunos de los mejores exponentes del género de las provincias de La Habana, Matanzas, Villa Clara, HolguÃn y del territorio, oportunidad de recreación y sano esparcimiento para todo el público seguidor.

Con la creación del Beat 32 hemos ido ganando en recursos técnicos y en espacios dentro de la Asociación Hermanos SaÃz destinados a la promoción del quehacer de los Djs.
Esta idea surgió a partir de la necesidad de fomentar la cultura dance, una vertiente artÃstica que genera emociones, estados de ánimos, sentimientos, ideas, posiciones, entretenimientos y espacios para el intercambio entre los jóvenes porque les da la oportunidad de reencontrar a amigos de todo el paÃs con los que casi nunca pueden compartir su música y sus conocimientos, al tiempo que las sesiones teóricas les proporcionan nuevas herramientas para sus creaciones.
¿Cómo llegas a la AHS?
Llegué a la AHS en el año 2016 como el primer productor de música electrónica que entraba en esa sección y comencé a colaborar en peñas como Karma People que dirigen actualmente los Djs ChapaX3MO y Nergal. Además, me vinculé con los proyectos socioculturales Cine en los Barrios y Golpe a Golpe para llevar la música electrónica a las comunidades rurales y barrios alejados del centro de la ciudad y brindar asà una propuesta novedosa que los jóvenes esperaban cada noche.

Sin dudas, la AHS me abrió las puertas, me dio una vÃa de apoyo y la plataforma necesaria para difundir la labor de los Djs que intentaban formarse un sello creativo propio y que todavÃa lo hacen.
Richard, nos hablabas de los espacios que ha creado la AHS para la difusión de la música electrónica en el territorio. ¿Qué es Fractal House?
Fractal House es un proyecto mÃo y de un grupo de amigos. Un dÃa nos reunimos los DJs productores Mad David, Nergall y Xami y “cocinamos†este sueño para difundir los distintos géneros y subgéneros de la música electroacústica propia e internacional con elementos tradicionales que se nutren de nuestras raÃces esencialmente cubanas. Todo con el objetivo de que los jóvenes conozcan lo que hacen nuestros artistas, porque son ellos su principal destinatario.
Actualmente Fractal House tiene su peña en la Casa del Joven Creador y en la sede del Proyecto EJO de la ciudad de Camagüey, en estos espectáculos vinculamos a los  Djs y VJs, con audiovisuales que ayudan a construir la historia propuesta en sus temas. Además de insertar a bailarines y actores teatrales para una puesta en escena más completa y atractiva.
Nuestros planes futuros es hacer una gira por todas las universidades de Camagüey, y si es posible de otras provincias, todo depende del apoyo que nos puedan brindar las instituciones.
Richy, a tu entender se puede realizar música electrónica sin tener una formación académica…
En mi caso, de ser un artista empÃrico a formar parte del staff de Djs productores del Laboratorio Nacional de Música Electroacústica significó mucho, sobre todo en el ámbito profesional, porque fue el resultado de todo el trabajo que anteriormente venÃa realizando en la AHS.

Pero sin dudas, hay que dedicarle muchas horas de estudio. Soy de los que piensan que se nace con el “bichito de la músicaâ€, ese que te estimula a levantarte todos los dÃas y que lleva el esfuerzo continuo y el empeño diario para lograr superarse en un mundo musical competitivo y que constantemente evoluciona.
Asà que no importa si eres aficionado o laureado, la profesionalidad, el amor por lo que haces y el talento deben ser los rasgos en común entre todos los artistas.
¿Cómo comienza este año para Richard Castro?
Ahora mismo estoy nominado a los premios Cuerda Viva y con vistas a presentarme al Cubadisco y he tenido la oportunidad de firmar con tres disqueras internacionales, pero lo más importante es seguir creando y desarrollándome como artista.
La música para mà es un modo de vida que hasta el dÃa de hoy me enamora, asà que mi plan es seguir haciéndola y dar mi granito de arena para que en Cuba haya un movimiento real de música electrónica.
Rumbávila Fusión pone en alto el nombre de Cuba
Con un repertorio consolidado en el arte de lograr una rumba fusionada con ritmos haitianos, la agrupación Rumbávila Fusión ha llevado su música hasta el Festival Viva la Salsa, efectuado en Perú por estos dÃas, y que se prestigia con artistas de gran valÃa y con noches interminables de conciertos.
Su presencia se hizo efectiva a partir de la invitación lanzada por Producciones Abdala, compañÃa que ha avalado su producción discográfica y su primera presentación aconteció el jueves 3 de octubre.
En el cronograma de presentaciones también se incluyen artistas cubanos como Los Van Van y Alexander Abreu y Habana D’ Primera, asà como otros internacionales entre los que figuran Jerry Rivera, VÃctor Manuelle, Tito Nieves y Alberto Barros.
Bajo la dirección de Ariel Gallardo RuÃz (El Goma), los músicos y bailarines de Rumbávila Fusión dejaron escuelas, dulcerÃas y los más disÃmiles oficios para sincronizarse musicalmente en este proyecto, cuando era solo eso: las ganas de unos cuantos de fusionar la rumba con los ritmos haitianos.
De presentaciones ocasionales y una plantilla conformada de a poquitos, pasaron a conquistar sistematicidad en las carteleras culturales, a codearse con los grandes del género en numerosos eventos, y a atesorar premios y reconocimientos.
Su primer fonograma llegó en el año 2015, con el tÃtulo Defendiendo mis raÃces, bajo el sello Unicornio de la casa productora Abdala, y en el segundo, La esencia de mi rumba, logran 12 temas que sin desligarse de la sonoridad y la métrica que los identifican, mostraron ritmos más acabados y variopintos. Entre ellos destacan La esencia de mi rumba y la versión musicalizada del concepto de Revolución, canciones que cuentan ya con videos-clips de amplia repercusión en la televisión nacional.
Si bien han dado de qué hablar y su hoja de vida en la música ya engrosa varias nominaciones a los Premios Lucas y al Festival Cubadisco, el mejor galardón llega con el aplauso de sus seguidores que encuentran en sus composiciones motivos suficientes para bailar y rendir homenaje a la rumba, género musical declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Ashé pa´ los Negrons
Cuando era difÃcil triunfar con carreras individuales en Bayamo, crearon lo que se llamó la Afroindustria, proyecto que reunÃa cerca de diez agrupaciones de rap y hip hop, y después de un par de años, en el 2006, nació Negrons.
Ganadores del Premio Cubadisco 2019 en la categorÃa de música urbana con el álbum Binary, los integrantes de esta agrupación defienden nuevas formas de hacer dentro del género, como asegura Ramón Sánchez Pérez, lÃder del grupo.
“El hecho de ser de Bayamo hace que seamos distintos desde nuestra forma de hablar, tenemos otra cadencia, otra melodÃa, y el estilo del rap es muy parecido en las agrupaciones. Nosotros rompemos un poco con eso porque tratamos de mover al público, darles un mensaje, pero también hacerlos bailar. Tratamos de mezclar géneros como el funk, el reggae, el dancehall…usamos el rap pero no en su esencia más pura. En nuestras canciones puedes escuchar mezclas de rap con guaguancó, rumba… Siempre está presente la música cubanaâ€.
“Todo grupo tiene su sello, pero en el rap se hace casi todo under ground y no tan comercial, y nosotros desde que fuimos en nuestros comienzos a un Festival el HolguÃn descubrimos nuevas formas de hacer Rap, no sólo under ground, sino algo similar a lo que hacÃa Madera Limpia (Guantánamo), y Tolerancia (HolguÃn). Ahà vimos que se pueden hacer otras cosasâ€.
Casi desde los inicios, Negrons integró la Asociación Hermanos SaÃz, institución que los apoyó totalmente y gracias a la cual realizaron sus primeras peñas en la ciudad de Bayamo. Incluso la AHS financió el primer disco del grupo «Contratiempo».
Por motivos personales y posibilidades de superación profesional, los jóvenes músicos de formación empÃrica llegaron a La Habana, para abrir asà una nueva etapa para Negrons, agrupación que ya habÃan  profesionalizado en el 2012 en Bayamo.
“Llegar a La Habana fue difÃcil porque tuvimos que comenzar desde cero todos los procesos. En ese punto tienes que reinventarte solo, tener trabajos extras, y representa un sacrificio doble.â€
https://www.youtube.com/watch?v=byUkuuQ1Z48
Tras algunos meses de intenso trabajo en la capital, las presentaciones se volvieron un poco más habituales, y Negrons comenzó a subir a los escenarios como invitado en diversos espacios, hasta que lograron crear una peña habitual en los jardines del Teatro Mella.
En el 2015 tuvieron una nominación para el premio Cubadisco con el fonograma Que onda, grabado también en Bayamo.
“Creo que la forma de interpretar y ver la música nos hace diferentesâ€, afirman sus integrantes, “porque nosotros tomamos el hip hop y el rap como base para las fusiones que hacemosâ€.
Para estos graduados universitarios que decidieron apostar por la música no hay obstáculos grandes, cualquier sacrificio ha valido la pena cuando suben al escenario y entregan al público esa mezcla de ritmos a la cual no puedes mostrarte indiferente. Con la música de Negrons afloran nuestras raÃces congas y carabalÃes, la cubanÃa se desborda cuando los toques de tambor te anuncian “Soy guajiro, vengo del monte…asà que Ashé pa´mis Negronsâ€.
https://soundcloud.com/user-84193165Â
Michel Herrera y sus aciertos
Sumario: La Banda Gigante, próximo a televisarse, lo tendrá como director musical, un rol que también asumió durante la unión de su banda con la Orquesta Aragón.
Michel Herrera está feliz, por muchas razones. Ha cosechado éxitos en su carrera como saxofonista, como compositor y productor musical, pero también como director musical de proyectos ambiciosos como lo es La Banda Gigante, programa televisivo que, bajo el auspicio de RTV Comercial, llegará a la pequeña pantalla a partir de este mes. [+]
Que no se pierda el fervor que ha dejado Escape
No fue un premio su meta, ni tan siquiera la nominación. Los que conocemos a Albertico Lescay sabemos que, ante todo, es sincero consigo mismo y defiende su espÃritu a través de la música que compone y a la que le suma una auténtica carga visual. Pero el Premio Cubadisco 2018 en la categorÃa de Ópera Prima lo toma como un reconocimiento al esfuerzo, al intenso trabajo que su agrupación Formas llevó a cabo y en el que Esteban Puebla, su mentor y productor musical desempeñó también un rol importante.
Raúl Paz: Busco discursos más apropiados para estos tiempos
Llega y me muestra el disco que reúne temas de la banda sonora de la telenovela cubana En tiempos de amar. “TenÃa esa deuda contigoâ€, me dice. “Y con todos los que disfrutaron la novela y mi concierto en el teatro Karl Marx, y me pedÃan el disco para escuchar todos los temas. Estuvo nominado al Cubadisco 2018 y eso también me dio mucha alegrÃaâ€.
Las alegrÃas que trajo el mambo
No sale de su asombro todavÃa, y le creo, porque en definitiva no anda por ahÃ, inflado con sus éxitos al cabo de diez años de trabajo. Sigue siendo un tipo sencillo, honesto consigo mismo y fiel con la herencia que otros que le antecedieron han dejado en el panorama de la trova cubana.