odio


Jóvenes artistas en redes: #ConBuenaFeYo

La “gula de celebridad†lleva lo que se merece: música de Buena Fe. El arte genuino, dondequiera que se presente, es una expresión sublime de paz, una ofrenda de amor.

Los ataques reiterados y cada vez más violentos contra el dúo de Israel Rojas y Yoel Martínez son inadmisibles, serviles al odio ciego contra quien esté con la Revolución, lo cual contradice el espíritu de “libertad y democracia†que tanto invocan.

¿Por qué el intento de boicot? Sus composiciones inteligentes e incluso críticas no sirven a esos intereses –que sabemos de dónde vienen–, aún coloniales, aún fascistas.

No obstante, ante el asedio delincuencial de algunos títeres políticos en España, muchos apelan al civismo, a la decencia, a la convivencia que el propio arte invita. La música es diálogo y eso molesta. Por eso, mejor decirlo cantando: #ConBuenaFeYo

Reaccionar al odio

Innumerables artistas e intelectuales han expresado su respaldo a Buena Fe en espacios digitales, donde cada vez más se disputa lo simbólico y esos resortes ideológicos, culturales, que nos impulsan a la acción fuera de ellas. A pesar de que el algoritmo dictador parcializa normas comunitarias, se ha logrado posicionar la etiqueta #ConBuenaFeYo en 14 000 publicaciones en Facebook.

No son pocas las “coincidencias†que benefician las campañas de odio, supuesta regla inviolable del Imperio de Mark Zuckerberg. Liliam Mendoza Estrada, directora de la Casa del ALBA Cultural, posteó:

“Pensando estoy en las trampas del algoritmo… como dijera el propio Israel Rojas Fiel.

Les cuento mi día en redes sociales:

8am: Sugerencia del día: Post de Yunior García sobre Buena Fe.

11am: Sugerencia del día: Página de memes contra Buena Fe.

2pm: Sugerencia del día: Página de memes contra líderes de Cuba y también contra Buena Fe.

5pm: Primera noticia en el navegador: Agreden a seguidores de la dictadura en Barcelona.

¿Casualidad?

Todo orquestado, como siempre, recuerdo a Ramonet en el texto: El imperio de la vigilancia

“…con la centralización de Internet, la «democracia digital», en la que se pudo creer en los albores, se ha revelado como una impostura y un engañabobosâ€.

En otra publicación rememora: “Hace unos días tuve el privilegio de recibir a Israel Rojas Fiel en mi oficina de la Casa del ALBA Cultural, oportunidad que agradezco infinitamente.

En veinte cortos minutos me hizo una radiografía de los problemas acuciantes que tenemos, del papel de los jóvenes en Cuba y la idea de construir un país mejor para nuestros hijos.

Un país con los que están, los que se fueron y los que tal vez quisieran regresar. Hablamos del papel de la cultura para la defensa de la soberanía. De las hazañas que mi generación viene protagonizando y las que tenemos por delante, le confesé algo que marcó mi vida y que ahora en medio de lo que ha ocurrido vuelve a mi mente .Hace casi ocho años tuve la posibilidad de asistir a la Cumbre de las Américas en Panamá, momento que marcaría el regreso de Cuba a este escenario.

Chocar ahí con cubanas y cubanos que defendían un discurso profundamente neoliberal, al servicio de agencias de los Estados Unidos fue duro, pero más duro fueron los insultos, la humillación a nuestros símbolos, las mentiras y falacias que llegaron en carteles provocativos hasta el lobby del hotel en que sesionaba el Foro de Jóvenes, verlos reunirse con uno de los participantes en el asesinato del Che fue sin dudas un parte aguas.

Desde ese día me sentí más patriota, más consciente, recuerdo que grité con una ferviente pasión todas las frases que mi madre podría haberme enjuiciando algún día, que canté el himno, que subí a los hombros del aquel entonces Secretario de la UJC en Pinar del Río y casi perdí la voz de cantar las canciones memorables del Silvio.

Si algo me quedó claro ese día es que solo hay dos bandos como Martí enunciara: los que aman y fundan – los que odian y deshacen.

En cuestión de principios hay que ser radicales, es mi visión.

Por ello: Siempre #ConBuenaFeYoâ€

Entre otros jóvenes artistas que han manifestado su apoyo en plataformas digitales a Israel y Yoel, figura el Dúo Iris.

“Llegó después de tantas miradas

Y fue sin más la lluvia que calma

Y verte fue encontrarme en tu reflejo porque la vida vuelve a repetir los sueños una y otra vez, una y otra vez.

Abriste una ventana cuando nadie quiso

Y todas las mañanas fueron como un vicio de sinceridad sobre mi café

Y sé de amores que van

tras ese espacio donde narras tus anhelos

Yo espero que vuelvas sin miedos

Y sé que acunas de fe a los que huyen de caminos sin espinas,

es vida, se crece mi suerte…

“Qué fortuna coincidir en tiempo y espacio. “Mi Suerteâ€â€¦ no podía llamarse de otra manera nuestro primer disco. Han sido nuestra suerte y la de muchos que reman a contracorriente en este complejo, pero hermoso mundo de la música. Les hemos dicho en varias ocasiones lo importante que son para nosotros, pero nunca será suficiente. Les queremos un montón, con ustedes siempre Buena Feâ€, concluye la publicación en redes sociales.

Por su parte, la cantautora Annié  Garcés reafirma:

“YO CON BUENA FE SIEMPRE

Porque son mis amigos, porque en los más duros momentos estuvieron a mi lado, porque han tendido sus alas sobre muchas generaciones de músicos cubanos…..

Porque su música nos hace amar

Porque sus canciones han acompañado nuestras batallas…

Porque sí….

Porque los quiero y los admiroâ€.

Igualmente, Nelson Valdés Viera, trovador y diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular, escribió en su cuenta de Facebook:

“Todo aquel que lleve luz y canto de la Cuba que hoy sobrevive a pesar de la durísima tormenta, será condenado. Alcemos la voz Israel Rojasâ€

En un segundo post, entre el malestar y la denuncia ante tanta barbarie, sentenció: “El fascismo no va a llegar, que nos arrastren sobre rocas, no van a entrar…â€

Los “Me enoja†y “Me encanta†caldean emociones reales y definen de qué lado se está, de acuerdo con el caso. Cada clic cuenta para restringir el comunismo o promover el modelo neoliberal, según la conveniencia algorítmica, creada a imagen y semejanza de sus dueños. Así, entre emojis y hashtag leídos al instante en Barcelona, Madrid o cualquier ciudad española, la vanguardia artística cubana alza su voz –a riesgo de ser silenciada por el ciberimperio–, en rechazo al hostigamiento contra Buena Fe, y exige respeto al derecho de expresar el arte, en cualquier parte del mundo.