Letra de Molde


Las aves de la literatura y su paso por Vueltabajo

Cada año a Pinar del Río migran aves por un corto periodo de tiempo. Son aves con desordenado vuelo, con plumaje distinto, con miradas distintas y una pasión común: la literatura.

Confluyeron en Letra de Molde, un espacio que le da voz al aleteo de sus alas y las dispersó por cada rincón para que todos escucharan sus trinos, para que en cada niño, joven y viejo de Vueltabajo retumbaran versos, cuentos, historias de vida; para que en todos anidara el amor a las letras.

“Esta jornada tuvo grandes fortalezas, alegrías y también una dolorosa despedida con la muerte de Heras León. Pudieron asistir escritores de otras provincias y se sumaron voces jóvenes que están haciendo muy buena literatura en Cuba. Se acercó también público que no había compartido un espacio como este, jóvenes universitarios y artistas que se dejaron llevar por la energía que se generóâ€, expresó Linda Gilsa, organizadora del evento.

En este vuelo se arremolinaron la música y las artes plásticas, el amor a la madre tierra y los sueños de los niños; revivieron las rimas de las primeras poetisas nacidas en este terruño, y cada uno imaginó un escenario mejor para la literatura en la patria grande.

“He participado en todas las ediciones de Letra de Molde, su grandeza radica en unir nuevas y viejas generaciones para crecer a la hora de escribir, mezclar las artes para decir mejor. Es una reunión llena de talento, que no está pensada en multitudes pero sí en calidad humana y profesional. Abrió la jornada la exposición Ensoñaciones de Yanetsy Ariste, y fue el momento que más disfruté por el punto de comunión de la plástica y la literaturaâ€, apreció por su parte el poeta y escritor para niños Alberto Peraza.

El espectador también se sintió contagiado por la libertad de las aves, por sus deseos de seguir volando en estos cielos, por la transparencia de sus escritos, por su literatura-laberinto donde confluye la vida que existe o que inventaron, por su escritura traducida en catarsis del alma y alimento.

“Los jóvenes que vinieron a la jornada regalaron magia, sinceridad, una visión contextualizada de una Cuba que conocemos y queremos ver crecer. En mi condición de público y artista disfruté la variedad del programa, la concepción del evento como un espacio para todas las artes, donde cada presente tiene un espacio de ser y expresarâ€, afirmó José Luis Izquierdo (Luisiño), líder del proyecto musical Fábula.

En esta edición, Letra de Molde fue el nido gigante donde todas las aves de la literatura se sintieron en casa, porque “es un espacio que crece, donde nacen proyectos y alianzas, donde convergen géneros y escritores diversos. Es una maravilla hecha palabra y superación que trasciende el suelo pinareñoâ€, valoró Rosamary Argüelles García, escritora espirituana.

Cuando se fueron las aves quedó el amor, el crecimiento, el sabor dulce del deber cumplido, la misión de llevar a casa letras e historias aprendidas, y la promesa de regresar.


Fraguela y la vuelta a la vega de la mano de Francisca

La segunda jornada del Festival Literario Letra de Molde nos regaló un acercamiento a la obra casi olvidada de poetisas pinareñas del siglo XIX. Mujeres, en su mayoría, de formación empírica que escribieron de amor, de luchas y de los demonios de una época de silencio femenino.

José Raúl Fraguela fue el hacedor de este milagro. Nos paseó por las Vegas sanjuaneras, nos envolvió con el humo de un tabaco, enarboló la bandera mambisa de la libertad y nos enamoró con sonetos, décimas y versos salidos de manos sensibles que simbolizan la historia de la poesía en tierras pinareñas.

Mi preferida, Francisca González y Ruz, sanjuanera, nacida en 1836, huérfana desde los 9 años y primera poeta emergida en estas occidentales tierras.

Destaca en sus versos la capacidad de transformar su dolor, de arraigarse a las costumbres de su terruño natal, de amar a su madre muerta, la versatilidad y el sentimiento.

«Huérfana, sin hogar y sin familia

voy errante cual triste peregrina,

sin un reflejo de la luz divina

que difunde el placer.»(Poema Desencanto)

Los 49 combates por la libertad de Adela Azcuy, también inundaron la sala de la Casa Hermanos Loynaz.

Su lírica independentista y delicada contrasta con su bravura en la lucha junto a Antonio Maceo. Renunció al amor y a las comodidades de la riqueza por la conquista de la libertad y sus escritos no se alejan de esa valentía sublime que solo una mujer puede expresar. Certera siempre con la pluma y el fusil.

«Y hoy en la niebla que en las tumbras [sic] brota,

Sobre el mismo lugar de la pelea

¡aún me parece que se agita y flota!» (Soneto Maceo en el viejo campamento)

También merecieron ser rescatadas del olvido Juana Pastor (1815), Elena Sabina (1836), Julia Acanda “La Tórtola de Cortésâ€, Sarah Cordoneda, Inocencia Silveira y Ciana Valdés.

Fue un espacio de viaje en el tiempo, al inicio mismo de la poesía en tierras donde crecía más que el tabaco y el ron, donde la sensibilidad femenina se hizo legible y perdurable.

Toda esta obra fue recogida, junto a otros artistas, unos 14 en total, en la antología El secreto fulgor, poetas pinareños nacidos en el siglo XIX, próxima a publicarse y sobre la que Fraguela expresó que representa un material de estudio para estudiantes y profesores, así como el rescate del patrimonio poético vueltabajero.

El también poeta, escritor para niños y eterno sanjuanero contagió de pasión, inspiró a estudiar la raíz, a amar la poesía desde sus esencias, a arraigarse a la patria chica porque es donde radica el alma de los poetas.

Todos esperaremos ansiosos esta vuelta a la Vega de la mano de Francisca y otras mujeres que hicieron de los versos y las rimas una forma de vida.


Letra de Molde: para soñar la literatura

Con el objetivo de debatir en torno a la creación literaria en la Isla se desarrollará la jornada Letra de Molde del 11 al 15 de abril en Pinar del Río, dedicada en esta edición al 120 aniversario del natalicio de Dulce María Loynaz.

La exposición de grabados Las Ensoñaciones, de la escritora pinareña Yanetsy Ariste, que por primera vez incursiona en las artes plásticas, fue la escogida para inaugurar de manera oficial el evento.

El programa propone, como espacios teóricos, un acercamiento a las “Voces femeninas en la lírica pinareña†a cargo de José Raúl Fraguela, y el panel “Desafíos de la literatura joven en la Cuba actual†con voces experimentadas como Elaine Vilar, Reynaldo Zaldívar, Ian Rodríguez y Jenny Pupo.

El espacio será oportuno para reconocer a los niños ganadores del concurso Madre Tierra y debatir acerca de los retos de la creación literaria en el contexto actual.

Cada encuentro estará aderezado con buena música y lecturas de poesía, y además tendrá como escenarios el Centro Hermanos Loynaz y la Casa del Joven Creador, lugares donde se fomenta esta manifestación artística.

Se prevé para el cierre de la jornada la visita al Monumento Dora Alonso en el municipio Viñales, y en la noche el Cabaret Filosófico de la mano de Polizonte teatro y la escritora del patio Belina Rodríguez.