Jacques Prévert


Cómo dibujar un pájaro según Jacques Prévert

Surrealista en sus inicios, irreverente e iconoclasta siempre, dueño de una libertad creativa que enarboló en cada uno de sus libros, Jacques Prévert (Neuilly-sur-Seine, 1900/París, 1977) es uno de los poetas fundamentales no solo de la lengua francesa; y aunque no intervino en las expresiones más formales del surrealismo, se le atribuye la paternidad de prácticas artísticas características del movimiento, como el cadáver exquisito (en su casa, una vivienda colectiva con el número 54 en la Rue du Château, se reunían entre 1925 y 1928, miembros del surrealismo como Raymond Queneau, Marcel Duhamel y Benjamin Péret).

La publicación por La Luz de Instrucciones para dibujar un pájaro salda una deuda con el lector cubano, al ofrecerle una selección, traducida por Irina Chaveco Pupo y Elizabeth Soto, de los poemas que Prévert escribió entre 1930 y 1944 y que, publicados con el título Paroles en 1946, lo reafirmaron como uno de los autores más importantes de su generación, una obra que figuró entre la “más leída de su tiempo†y que “nos sigue seduciendo hoyâ€, como asegura Lourdes Arencibia en el texto, especie de prólogo, que acompaña como brújula la lectura.

Paroles le dio a Prévert el reconocimiento que le fue huidizo al principio, cuando sus contertulios de las tabernas y cafés parisinos consideraban su poesía “demasiado populista y bohemiaâ€. Sin embargo, escribe Arencibia, “la difícil facilidad de la poesía iconoclasta de Prévert, su sentido de la imagen insólita y de humor crítico, su naturalidad, su estilo en apariencia sencillo y accesible al lector, con una visibilidad que explota al máximo la representatividad del habla siempre cercano al lenguaje de la calle y a los sucesos de la vida cotidiana francesa, es a la vez diverso tanto en el fondo como en la formaâ€. La traducción cubana realizada por Irina y Elizabeth supo vencer la mezcla de referencias literarias y religiosas, lugares, personajes y circunstancias históricas, y los elementos del surrealismo, el absurdo, la antítesis, la ironía, la convivencia de textos sin puntuación ni estilo definido, la mezcla de poemas largos y cortos, los juegos de palabras, las aliteraciones, los aforismos y neologismos, la combinación de recursos de la oralidad y la escritura… que caracterizan Paroles y que lo convirtieron en uno de los “autores franceses más admirados, cantados, recitados y conocidos no solo en Francia, sino en el mundo entero, porque Prévert dejó su impronta creativa para públicos de cualquier edad e incursionó en casi todas las esferas de las artes†(el cine, la musicalización de textos, la representación escrita del lenguaje pictórico).

Prévert fue –algo difícil en otros tantos “poetas malditosâ€, muchos de ellos franceses– un irreverente que, quizá por ello mismo y por las posibilidades de su verso, se convirtió en popular, al punto de ser leído y recitado en los diferentes niveles de enseñanza en lengua francesa.

Organizados como en el cuaderno original, mostrando que el poeta “sabe desplazarse con absoluta facilidad y elegancia dentro del ámbito literarioâ€, en los textos de Instrucciones para dibujar un pájaro, que avistan el espíritu europeo desde el fin de la Primera Guerra Mundial al inicio de la Segunda, Prévert “adopta una voluntad de conformación fónica de modo consciente o inconsciente que hacen del poema una estructura libre, donde se respira un tempo que es otorgado por las sensaciones que trasmite el autor, en su burla o halago, aboliendo los signos de puntuación, incluyendo una ortografía a su antojoâ€, aseguran Soto y Chaveco.

¿Qué caracteriza, además de lo expuesto, su poesía? ¿Y qué peculiaridades en la obra de Prévert marcaron el arduo trabajo de traducción? “Una lectura en voz alta de sus poemas en francés denota su propósito de crear hemistiquios melódicos, especie de anagramas para decir lo dicho, de una manera más amena, más tonal. Un juego de palabras que burle la situación, el entorno, un sentimiento en específico, dislocaciones de estructuras sintácticas que organizan o desorganizan el cerebro de los personajes, conmutaciones en los sintagmas, frases con deformación cuyo referente lingüístico, es evocado por el lector u oyente. La repetición, el inventario verbal o sustantivado, encadenamientos, paralelismos, notaciones como pinceladas que conforman por yuxtaposición un relato narrativo o dramáticoâ€.

Los noventa y cinco poemas que componen Paroles habían sido recitados una y otra vez por Prévert a sus amigos antes de consentir en su publicación (Henri Michaux lo incitaba a escribir, y Prévert, concluido cada texto, lo enviaba al poeta y pintor belga). “Los regalaba a sus amigos, a veces los entregaba para alguna revista, los dedicaba al grupo de teatro Octubreâ€, pero cuando salieron, publicados por Bertelé y Gallimard, Paroles “resultó un acontecimiento literario: cinco mil ejemplares se vendieron a la primera semanaâ€. La fuerza, la reinvención, el anticonformismo virulento y la rebeldía, junto a una diversidad temática que marca su rechazo a utilizar un lenguaje manido y alambicado, y su derecho a generar un texto conforme a su imaginario, más el amor, la camaradería, el espíritu de insurrección, la guerra, donde une ternura y violencia… marcan su obra poética. Además palpamos el humor, la burla, la mordacidad, la descripción cruda de los acontecimientos, sus opiniones críticas a las instituciones, como al sistema educativo, la iglesia y la familia tradicional y patriarcal.

Este libro –señal de que el pájaro de Prévert ha cantado y seguirá haciéndolo– “busca en cada verso desasirse de las rejas de la poesía anteriormente escritaâ€, al llenar “estas páginas con una verdad dicha sin apegos a convencionalismosâ€. Suerte no solo para el lector cubano, sino para el hispanoamericano, esta traducción de Irina Chaveco y Elizabeth Soto publicada por La Luz, que con edición de Liset Prego y diseño de Robert Ráez a partir de una fotografía de cubierta de Norlys Guerrero, nos entrega a una de las voces fundamentales de la poesía escrita en lengua francesa y de la lírica universal: la inconfundible voz de Jacques Prévert.

 


Instrucciones para traducir a Jacques Prévert

La publicación en Cuba de Instrucciones para dibujar un pájaro, selección de la obra del poeta francés Jacques Prévert (1900-1977), uno de los autores fundamentales de la literatura del siglo XX, constituye un verdadero acontecimiento en nuestro ámbito editorial.

Ediciones La Luz asumió el reto bajo la guía de Luis Yuseff y el trabajo de selección y traducción de las jóvenes Irina Chaveco Pupo y Elizabeth Soto. Esta unión –Elizabeth poeta; Irina traductora– le aportó a “cada verso una mirada distintaâ€, asegura Irina, pues el objetivo es que “nuestra propuesta de traducción fuera el resultado de la confluencia de esas dos miradasâ€. De esta manera, La Luz entregó al lector cubano y latinoamericano “la más extensa selección de la obra de Prévert†realizada en el país.

Fotos cortesía de la entrevistada y Ediciones La Luz

Profesora e investigadora, Irina Chaveco es miembro de la Asociación Cubana de Traductores e Intérpretes. Se graduó de traducción en inglés y francés en la Universidad de Holguín y realizó un máster en Traducción Profesional e Institucional en la Universidad de Valladolid, en España, y un curso de Dirección general de traducción de la Unión Europea, en Bruselas, Bélgica. Posee experiencia en la traducción jurídico-financiera, técnica y literaria, campo este último donde se inserta su trabajo, con Elizabeth Soto, en la traducción de los poemas que Prévert escribió entre 1930 y 1944 y que, publicados con el título Paroles en 1946, lo reafirmaron como uno de los autores más importantes de su generación; con una obra que figuró entre la “más leída de su tiempo†y que “nos sigue seduciendo hoyâ€, escribió Lourdes Arencibia en el texto, especie de prólogo, que acompaña como brújula la lectura.

La traducción cubana realizada por Irina y Elizabeth supo vencer –lo cual representa un mérito indiscutible, añade la prologuista– la mezcla de referencias literarias y religiosas, lugares, personajes y circunstancias históricas, y los elementos del surrealismo, el absurdo, la antítesis, la ironía, la convivencia de textos sin puntuación ni estilo definido, la mezcla de poemas largos y más cortos, los juegos de palabras, las aliteraciones, los aforismos y neologismos, la combinación de recursos de la oralidad y la escritura… que caracterizan Paroles y que lo convirtieron en uno de los “autores franceses más admirados, cantados, recitados y conocidos no solo en Francia, sino en el mundo entero, pues dejó su impronta creativa para públicos de cualquier edad e incursionó en casi todas las esferas de las artesâ€, añade Lourdes Arencibia.

Dejemos que sea Irina quien nos cuente sobre su experiencia con la traducción de la poesía de Prévert en estas Instrucciones para dibujar un pájaro publicadas por La Luz.

¿Antes de Instrucciones para dibujar… habías incursionado en la traducción literaria?

En realidad sí. Había comenzado a traducir a R. R. R. Dhlomo, un periodista y escritor sudafricano de la primera mitad del siglo XX, pero ese es un trabajo que se mantiene inédito.

¿Por qué precisamente Prévert? ¿Cómo surge la idea de traducirlo, la génesis del proyecto?

El proyecto surgió de la mano de Luis Yuseff y Elizabeth Soto. Ellos seguramente podrían dar más detalles al respecto. Yo me uní por invitación de Elizabeth, y lo asumí con mucho entusiasmo, pues recién llegaba de España de terminar un máster en traducción y esta fue una oportunidad inigualable para el ejercicio de la profesión.

Fotos cortesía de la entrevistada y Ediciones La Luz

¿Este es el primer libro de Prévert en Cuba? ¿Estaba publicado en antologías o revistas?

Al parecer es, al menos, la más extensa selección de la obra de Prévert realizada en nuestro país.

Paroles está compuesto por más poemas… ¿Cuál fue el criterio de selección de los textos?

La intención era mostrar a ese Prévert tan diverso en contenido y forma. Y me permito aquí retomar algunos fragmentos del prólogo que responde con detalles la pregunta:

Nuestra selección se basa fundamentalmente en el contenido, la belleza lírica, la calidad textual, la estructura de los poemas. Hemos querido ilustrar a Prévert en varias de sus facetas: el contestatario, el anticlerical, el romántico, el que condena la pobreza, el hombre con una vastísima cultura que con tanta delicadeza deja asomar en sus escritos, haciéndolo de manera casi imperceptible, como queriendo que nadie lo note… Así, hemos seleccionado poemas como Intento de descripción de una cena de cabezas en París-Francia, con su representación del comportamiento de la clase dominante cuando se siente amenazada. Para el Prévert anticlerical no podía faltar el Pater Noster, al cual también acompañan obras como La cena o Verá lo que verá. El tema del amor se ilustra con Arenas movedizas, Casi, Desayuno…Tampoco nos podían faltar La grasse matinée que presentamos como Bien alimentado, con su gran crítica social; El paseo de Picasso, donde se vislumbra su concepción del arte; Sucesos, en cuyo final predice la revolución; El lavado, como crítica a la familia tradicional, patriarcal, anticuada; o su rechazo a la educación dogmática con Page d’écriture, Castigo en nuestra versión. Como representativo de ese recurso tan socorrido por Prévert, el inventario, seleccionamos precisamente Inventario, composiciones todas que muestran al Prévert polémico, al que condena las injusticias sociales, la guerra…

¿Cuáles fueron las principales dificultades (lingüísticas, sintácticas, de contenido, etc.) que les planteó traducir la poesía de Prévert al español?

Traducir a Prévert supuso todo un reto. Verso tras verso se develaban nuevas y diversas dificultades de traducción. Así, por ejemplo, el tratamiento de las aliteraciones –recurso recurrente en Prévert– planteó no pocos escollos para lograr mantener el recurso a la vez que se trasmitía el sentido. Lo mismo sucedía con las rimas, que aunque con muy pocas apariciones dentro de la obra de Prévert, constituyen una de las problemáticas fundamentales de la traducción de poesía.
Por otra parte, podría citar los neologismos, de los cuales Prévert hizo gala en los primeros versos de Intento de descripción de una cena de cabezas: “los que tricoloran/los que andromacanâ€, y así, una serie de ellos.

No menos desafiante resultó ser la intertextualidad en Prévert. El juego creativo en este autor pareciera no tener límites, como mencionaba anteriormente, en ocasiones juega a inventar palabras, en otras juega con sus sonidos y en otras va un poco más allá y juega con la obra de otros autores, tanto contemporáneos y amigos como con aquellos que ya habían trascendido en el tiempo. La intertextualidad, tanto implícita como explícita, supone un reto a la hora de traducir. Prévert manipula, por citar un ejemplo, un verso del poema El albatros de Baudelaire. Era preciso, entonces, consultar cómo había sido traducido ese poema en nuestro contexto –como vía para trasmitir la intertextualidad al lector meta– y luego reproducir la estrategia de manipulación que utilizó el autor de Paroles.

De la misma manera, el constante uso de referentes culturales, tanto hechos como lugares o personajes, obliga a quien traduce a mantener una coherencia entre el texto traducido y la forma que ya ha tomado esa referencia en nuestra cultura si fuera el caso, o bien a añadir notas aclaratorias o explicitar aquellos elementos menos conocidos que son imprescindibles para la mejor comprensión del texto.

¿Cuáles crees son las características principales –esas que lo diferencian de la obra de sus contemporáneos franceses– de la poesía de Jacques Prévert?

El movimiento surrealista, surgido en el siglo XX, se caracteriza por el humor negro y el rechazo a todo lo que se impone, pero ese rechazo va acompañado de un deseo de renovación. Es así que en la época impera un espíritu de revuelta y de libertad, espíritu que se refleja también en la poesía. Los surrealistas impusieron nuevas formas de hacer poesía, otorgaron un lugar privilegiado a las imágenes y crearon recursos para relacionar realidades que antes era impensable relacionar. Esta, según se afirma, es la génesis de la poesía de lo cotidiano. Prévert, como poeta que coquetea con el surrealismo, es un importante representante de la poesía de lo cotidiano. Se hizo popular gracias a su lenguaje coloquial, su humor y sus himnos a la libertad. Le interesaba la sencillez –no así la simpleza– del lenguaje, se negaba a escribir poesía que no pudiera ser leída por todos. Esta confluencia de intereses y talento dio como resultado aquello que podría ser catalogado como signo distintivo de Prévert: un lenguaje sencillo con un hábil uso de juegos de palabras en todas sus formas, herramienta muy eficaz que probablemente hizo pudiera llegar a un público amplio.

Además, en Prévert encontramos poemas de longitud variable, desde muy pocas líneas hasta una docena de páginas, las rimas son escasas, pero hay juegos rítmicos y también de sonidos como la aliteración, las repeticiones son frecuentes, al igual que el recurso del inventario. Otra característica de este autor son las imágenes inusitadas, una capacidad extraordinaria para jugar con las palabras y otorgarles significado y forma a su antojo, además de un uso exquisito de la ironía, el sarcasmo y el humor.

Fotos cortesía de la entrevistada y Ediciones La Luz

¿Cómo se traduce a dos manos? ¿Tradujeron conjuntamente o determinados poemas cada una?

Tradujimos todos los poemas de manera conjunta. El trabajo mancomunado era, precisamente, la razón de nuestra unión. Cada una, influenciada en alguna medida por su principal hacer –Elizabeth poeta, yo traductora– daría a cada verso una mirada distinta. Y ese era el objetivo: que nuestra propuesta de traducción fuera el resultado de la confluencia de esas dos miradas.

¿Quedaste satisfecha con el arte final del poemario? ¿Qué descubrirá el lector hispanoamericano cuando se adentre en estas Instrucciones para dibujar un pájaro?

Fotos cortesía de la entrevistada y Ediciones La Luz

Sí, sin dudas, estoy satisfecha, y además aprecio el trabajo realizado por cada uno de los que contribuyeron a que hoy el lector tenga a su disposición este poemario. Me enorgullece haber podido contar con el prólogo de Lourdes Arencibia. Agradezco a Luis Yuseff y Ediciones La Luz, la edición de Liset Prego, el diseño de Roberto Ráez, la fotografía de Norlys Guerrero Pi, la diagramación de Norge Luis Labrada, la corrección de Mariela Varona, y a ti, Erian, por leer nuestra traducción y contribuir a su promoción.

Y en cuanto al lector, prefiero permitirle el placer de descubrir a Prévert dentro de las páginas del libro, aunque sí sería conveniente que nadie imagine que porque el poemario Paroles se publicó en una tierra y tiempo distantes –la Francia de 1946–, el autor no tiene nada que decirnos a los cubanos de estos tiempos, nada más alejado de la realidad.

Me despido con una invitación a la lectura, pues se sorprenderá el lector de cuánto puede hacernos reflexionar sobre nuestro día a día con sus metáforas, con sus ironías, con sus sarcasmos, con sus preocupaciones tan parecidas a las nuestras, con sus tiempos tan parecidos a nuestros tiempos.

Fotos cortesía de la entrevistada y Ediciones La Luz

Los eBooks de La luz

Como se ha venido diciendo desde hace un tiempo, una de las propuestas para la promoción de la literatura que se hace en nuestra casa editora, La Luz, es la versión de los libros en su formato eBook. Teniendo en cuenta la carencia que afronta el país con la escasez de papel, esta ha sido una buena manera para que pueda llegar a todo el que se interese. Así que me he dado a la tarea de reseñar y anunciar cada título.

Se acerca a esta promoción Jacques Prévert. Instrucciones para dibujar un pájaro a cargo de las traductoras Irina Chaveco y Elizabeth Soto.

Jacques Prévert, poeta francés que vino al mundo justo en la inmediatez de un nuevo siglo, fue un escritor, dramaturgo y guionista, se le atribuye también la paternidad de varias prácticas artísticas como el cadáver exquisito, ejercicio propio del movimiento surrealista de aquella época. Prévert se movió por situaciones económicas convulsas desde su niñez. Este hombre de una observación profunda supo mediante la palabra visualizar y describir de una forma peculiar los horrores de la segunda Guerra Mundial y las injusticias propias de la sociedad. No fue aceptado desde el primer momento en la vida literaria parisina pues su poesía, considerada por muchos repugnante por ser escrita en lenguaje popular, no mostraba a decir de los literatos de la época la belleza de la lírica académica a la que estaban acostumbrados.

Tiempo después, digamos que por la perseverancia y la calidad de sus versos, el poeta comienza a ser importante y tomado con notoriedad, justo cuando habla de versos que mitigan la pobreza y alientan al amor. Paroles, su poemario más conocido, llegó tras la guerra en 1946 para marcar un hito en las letras francesas, ya cuando el autor era reconocido justamente por una serie de guiones cinematográficos.

Su carácter rebelde se vislumbra en cada uno de estos poemas que presentamos en la selección. Adoptan una voluntad fónica de modo consciente o inconsciente que hacen del poema una estructura libre, donde se respira un tempo que es otorgado por las sensaciones que trasmite el autor, en su burla o halago, aboliendo los signos de puntuación, incluyendo una ortografía a su antojo.

Una lectura en voz alta de sus poemas en francés denota su propósito de crear hemistiquios melódicos, especie de anagramas para decir lo dicho, de una manera más amena, más tonal. Un juego de palabras que burle la situación, el entorno, un sentimiento específico, dislocaciones de estructuras sintácticas que organizan o desorganizan el cerebro de los personajes, conmutaciones en los sintagmas, frases con deformación cuyo referente lingüístico es evocado por el lector u oyente. La repetición, el inventario verbal o sustantivado, encadenamientos, paralelismos preferentemente con estructuras sintácticas, notaciones como pinceladas que conforman por yuxtaposición un relato narrativo o dramático.

Jacques Prévert es sin dudas uno de los poetas más irreverentes del siglo pasado, que insistió por encima de todo en hacernos sentir el placer absoluto de la poesía.

Desayuno

  • Echó café
  • En la taza
  • Echó leche
  • En la taza de café
  • Echó azúcar
  • En el café con leche
  • Con la cucharita
  • Lo revolvió
  • Bebió el café con leche
  • Y regresó a la taza
  • Sin hablarme
  • Encendió
  • Un cigarrillo
  • Hizo círculos
  • Con el humo
  • Echó las cenizas
  • En el cenicero
  • Sin hablarme
  • Sin mirarme
  • Se levantó
  • Se puso
  • El sombrero
  • Se puso la capa
  • Porque llovía
  • Y se fue
  • Bajo la lluvia
  • Sin una palabra
  • Sin mirarme
  • Y yo me puse
  • Las manos en el rostro
  • Y lloré.